El ministerio púlico reclama la pena de tres años de prisión y nueve meses de multa a razón de 10 euros al día para el acusado de haberse quedado con una máquina que había alquilado y trasladarla a Marruecos.

Según se recoge en el escrito de calificación, el acusado alquiló a una empresa una planta móvil de cribado por el importe de 139.386 euros, fijándose el plazo del contrato de 60 meses, por lo que el mismo expiraba en 2 de noviembre 2013. Según sigue señalando el fiscal, con fecha 31 de octubre del 2013 la empresa notifica al acusado que debe devolver la citada planta, ante el incumplimiento de las cláusulas previstas en el contrato. Sin embargo, dice el fiscal, "el imputado no solo no cumplió con pagar las cuotas del arrendamiento" sino que además, sin respetar que el contrato fijaba que el bien alquilado no se podía mover del lugar donde estaba, el acusado "la trasladó a Marruecos, en concreto a la ciudad de Beni Mellal, donde al parecer se encuentra y sin que sus propietarios puedan hacerse con ella ante los elevados costes de traslado a la península de dicha planta de cribado".

Estos hechos son, a juicio del ministerio público, constitutivos de un delito de apropiación indebida.