El nuevo equipo de gobierno de la Diputación, encabezado por el socialista Antonio Ruiz y formado por el PSOE e IU se han propuesto como objetivo prioritario para el presente mandato la lucha contra la despoblación rural, según puso de manifiesto el propio presidente en su discurso de toma de posesión. Ante lo cual, Ruiz hizo un llamamiento para que todas las administraciones establecieran una estrategia común para combatir este problema. Desde su ámbito de competencias, anunció que todas las áreas de gestión de la institución provincial tendrían «como eje decisivo la fijación de la población al territorio». Ruiz considera necesario que se dote a los núcleos rurales de las prestaciones y servicios que equiparen en calidad a los que se prestan en las poblaciones mayores, así como generar condiciones que mejoren la empleabilidad de los jóvenes.

La primera repercusión directa de esta declaración de intenciones se ha comprobado en los presupuestos de la institución provincial, aprobados la semana pasada, y sobre los que el presidente y alcalde de Rute volvió a incidir en que están elaborados pensando en combatir la despoblación de los núcleos rurales de la provincia.

En concreto, Ruiz puso de manifiesto en el acto de presentación de las cuentas que 24,2 millones de euros se destinan a programas diseñados contra la despoblación de la provincia y el desempleo.

Esta idea se materializa en el cambio de valoración de los criterios a evaluar para conceder determinadas subvenciones, de modo que ahora la dispersión poblacional o el riesgo de despoblamiento tendrá una mayor consideración. El plan de aldeas es otro de los que ha recibido una mayor cuantía, llegando hasta los dos millones, priorizando en la mejora de dotaciones e infraestructuras de comunicaciones y caminos.