Ocurrió que al nacer el niño se planteó qué nombre ponerle y dado que el del padre era José, aunque todos lo conocían por Pepe, la madre se negaba en redondo asignarle idéntico nombre que su progenitor porque creía que le llamarían en un futuro Pepito. Así las cosas, la madre propuso que el niño se llamase Mario, a lo que la madre política contestó qué había puesto el tal Mario en ese nacimiento, no llegando la sangre al río y el crío se llamó al final como su progenitor.

Lo anterior, que es totalmente verídico, viene a cuento respecto al cambio de denominación de mi antigua calle, «Fernando Fernández Martínez», por la de «Manolo Rubia» y me pregunto, qué puso o tuvo que ver ese Manolo Rubia con mi barrio.

Los defensores del mismo me dirán lo mismo que Cordobapedia: era una gran persona y sobre todo, fundador del sindicato Comisiones Obreras en Córdoba. Si a ello añadimos que no nació en Córdoba, aunque viviese toda su vida en nuestra capital, reitero, ¿qué tiene que ver esa persona con mi barrio de Cañero Viejo? Y peor, me asalta una duda: no se habrá cambiado el nombre en plan revanchismo como siempre al quitar el nombre del primer jefe de la Falange Española en Córdoba por el fundador de un sindicato de signo totalmente contrario. Creo que sería muy sospechoso el cambio producido.

Aunque en esta Córdoba cainita no sería la primera vez que se lleva a cabo la imposición de un nombre vinculado a un bando para sobreponerlo al de otro. Así, sirva como ejemplo la calle Miguel de Unamuno, en el barrio de la Fuensanta, que fue cambiado por el de Millán Astray, fundador de la legión española y otro más sorprendente fue el de la calle Alcalde Sánchez Badajoz por el de su anterior denominación, Salvador Muñoz Pérez, a la sazón alcalde impuesto por los golpistas, una vez fusilado Sánchez Badajoz.

Para mí existe revanchismo, seguimos con las dos Españas, según decía Antonio Machado. No tengo nada personal con el titular nuevo de mi antigua calle pero insisto, ¿qué tuvo que ver ese personaje con mi barrio? Nada. Con ello se puede apreciar lo rigurosa que ha sido la Comisión encargada de los cambios de callejero. He de confesar que fui requerido para proponer un nombre y que lo hice. Personas del barrio, que fundaron el mismo, tales como Enrique Ogallas, Matías el tabernero, Aquilino, el de las patatas y, sobre todo, el de Juan Luque Juanillón que incluso dio su nombre a una parada del autobús de Aucorsa, etc., pero no, era más importante poner el de un sindicalista sobre un falangista.