Toda buena puesta en escena precisa de una buena claque que señale los momentos álgidos de la obra o el discurso. Ayer, la presentación de la candidatura de Podemos contó con una buena claque que no dudó en aplaudir y gritar «sí se puede» en mitad de la rueda de prensa que ofrecieron los dos cabeza de lista. Con ese público, cualquiera se animaba.