De un tiempo para acá España tiene serios y graves problemas difíciles de detallar. Por la nefasta gestión del actual Gobierno socialista, se rumorea que por el horizonte se aproximan unas elecciones anticipadas (generales y autonómicas). Y tal como está el patio político, yo soy partidario de dichas elecciones, porque en política no todo está permitido, como es el caso socialista, pues muchos de ellos rozan en el engaño, en las falsedades. Se dice que el fin no justifica los medios. En política no todo vale. No se trata de aparentar, engañar o convencer a base de palabras más o menos vacías. Todo es cuestión de solventar problemas pero con capacidad y honradez. Si se llega a las elecciones, deseadas por la mayoría de los ciudadanos, deberán tomarse con responsabilidad, buscando soluciones y no querer obtener poder y beneficios personales; aprovechar las elecciones anticipadas para promover los grandes valores que se han perdido, dentro de una convivencia ordenada y fecunda, donde abunde la verdad, el amor, la justicia, la libertad y la solidaridad.