Pese a convertirse en blanco de las críticas por los polémicos y hasta peligrosos remedios naturales que va popularizando a través de su web, Goop, Gwyneth Paltrow no escarmienta y vuelve a la carga con un nuevo consejo de belleza. Tras promover un absurdo tratamiento vaginal con vapor, la picadura de abejas como remedio antiarrugas y las lavativas de café para tener el colon reluciente, la actriz, de 45 años, defiende ahora la acupuntura facial.

La intérprete, que ganó el Oscar por su papel en Shakespeare in love, acudió al centro de medicina alternativa de Nueva York que dirige el célebre acupuntor chino Paul Kempisty, que cobra 160 euros por cada sesión de acupuntura facial.

Paltrow es, además, una de las celebridades que se sumó a consumir aceite de coco. En concreto, lo emplea para cepillarse los dientes (y otras cosas, porque también se lo lleva a la cama como lubricante sexual, según confesó en alguna ocasión).