Lo primero, cerrar la temporada 2019/20, si se puede. El Córdoba CF no se ha pronunciado oficialmente sobre la nueva propuesta planteada por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) de cara a la próxima temporada, con la creación de una nueva categoría, la Segunda División B “Pro” o “Élite” en la que el conjunto blanquiverde militaría en el Grupo Sur de la misma en caso de que dicha propuesta salga adelante. Los dirigentes blanquiverdes mantienen como premisa, en la actualidad, resolver las posibles eliminatorias de ascenso a Segunda División A y, posteriormente, valorar dicha propuesta. Unos play off sobre los que, por cierto, en el Córdoba CF se sigue con la idea de que se disputen por 32 equipos, es decir, los ocho primeros de cada uno de los cuatro grupos de Segunda B en el momento en el que se detuvo la competición, en la jornada 28.

A lo largo de esta semana se debe avanzar sobre ambas ideas. Luis Rubiales debe comunicar a las territoriales el nuevo acuerdo firmado con LaLiga, impulsado por el Consejo Superior de Deportes (CSD) por el que la RFEF percibirá una partida más amplia de dinero procedente del reparto televisivo del fútbol español. También deberá decidir si las eliminatorias de ascenso las disputarán 16 equipos (es lo que pretende el organismo federativo) o 32, como pretende el Córdoba CF y otros clubs. A partir de ahí, y sea cual sea la decisión tomada, se podrá avanzar sobre esa nueva categoría que, en principio, estaba pensada para la temporada 2021/22, aunque todo señala a que podría arrancar ya para la 2020/21, entre otros motivos, porque según informó la Cadena Ser, casi 40 clubs del fútbol de bronce español han mostrado su apoyo a la constitución de esa Segunda B “Pro” o “Élite”. Formada por dos grupos de 20 equipos cada uno, el ascenso directo a Segunda División A sería para los campeones de cada uno de los dos grupos, mientras que los segundos y terceros clasificados se disputarían las otras dos plazas por eliminatorias directas, segundo contra tercero, con el encuentro de vuelta disputándose en el campo del mejor clasificado en Liga regular. Descenderían a Segunda División B los cuatro últimos de cada grupo. Además, dicha nueva categoría tendría unos tintes más profesionales, con un control económico por parte de la RFEF, a imagen y semejanza del que impone LaLiga en Primera y Segunda División, y también se pretende un mayor nivel de ingresos por derechos federativos destinados a esos 40 equipos. Aunque en la entidad blanquiverde se rehúye de una postura oficial, este periódico pudo saber que no se ve con malos ojos su creación.

Por otro lado, el parón liguero a causa de la crisis del coronavirus parece no alterar la calma entre los dirigentes del Córdoba CF. Desde hace semanas se ha insistido desde la entidad blanquiverde que no hay ningún tipo de planteamiento sobre ejecutar un ERTE a los trabajadores y a la primera plantilla y a pesar de que algunos comentarios en los últimos días se encaminaban hacia la posibilidad de aplicar una rebaja porcentual en las nóminas en función de las escalas salariales, la entidad blanquiverde informó a este periódico que no se ha hablado con ningún trabajador. El Córdoba CF trabaja en todos los escenarios posibles, al parecer, aunque aún no ha dado ningún paso dirigido a aliviar la carga salarial mensual que soporta sin ningún tipo de ingreso en estas más de seis semanas sin fútbol.

Debe ser durante esta semana cuando se produzcan movimientos en la RFEF, tanto en lo que se refiere a eliminatorias de ascenso y a una posible nueva categoría, así como sobre el nuevo acuerdo económica con LaLiga. Posiblemente entonces se aclarará el panorama. Por lo pronto, el Córdoba CF tira de prudencia y se centra en las posibles eliminatorias de ascenso.