Julen Lopetegui, seleccionador español, probó varias opciones ofensivas para el encuentro ante Italia de pasado mañana, sábado, dejando ver ante una gran expectación en La Ciudad del Fútbol, una de las posibilidades que baraja, jugar con falso nueve, posición en la que probó con Marco Asensio.

La grada de La Ciudad del Fútbol se quedó pequeña para acoger la cantidad de aficionados de la Roja que quisieron presenciar el único entrenamiento abierto de la semana. Todos los asientos ocupados y seguidores siguiendo de pie las acciones de los internacionales españoles, animándolos, con Asensio, Isco Alarcón, Andrés Iniesta y David Villa como los más coreados. Tras el calentamiento y los habituales ejercicios con balón, Lopetegui dispuso de un partido a todo campo en el que probó variantes. No mostró el equipo que tiene en mente pero sí detalles que va probando esta semana para decidirse por el sistema y por los elegidos para el partido clave ante Italia del Santiago Bernabéu.

En el primer partido de rojo jugaron: Reina, Carvajal, Bartra, Nacho Jordi Alba, Saúl, Thiago, Iniesta, Silva, Pedro y Morata. En este equipo el seleccionador juntaba los laterales que se perfilan titulares más un posible ataque si mantiene el 4-3-3 con Silva partiendo de derecha por la baja de Vitolo y Pedro en la izquierda.

De blanco estuvieron De Gea, Azpilicueta, Piqué, Sergio Ramos, Monreal, Busquets, Koke, Isco, Deulofeu, Asensio y Villa. Los centrales titulares juntos y un centro del campo con aroma a titular. Koke firmó el único gol.

Hubo tiempo para un segundo partido y la prueba del falso nueve. Lo hizo Lopetegui en un equipo en el que inició De Gea, Azpilicueta, Pique, Ramos, Jordi Alba, Busquets, Saúl, Iniesta, Silva, Isco y Villa. Al retirar al Guaje y dar entrada a Asensio que probó adelantando unos metros su habitual posición.

Tras una hora y diez de entrenamiento, los jugadores de la selección se retiraron entre la ovación de los aficionados y tuvieron libre el resto del día.

El Santiago Bernabéu presentará un lleno en el decisivo encuentro de clasificación al Mundial 2018 entre españoles e italianos tras acabarse las entradas que se pusieron a la venta en el estadio después de venderse en apenas 24 horas 52.000 por internet.

Los 81.044 asientos de la capacidad actual del Santiago Bernabéu se ocuparán en un partido que ha levantado mucha expectación y en el que la Roja puede dar un paso de gigante.