El torero Juan José Padilla fue galardonado ayer con el premio Nacional de Tauromaquia, que concede el Ministerio de Cultura y Deporte, una distinción que reconoce su «extraordinaria carrera de veinticinco años en los ruedos» y que para el diestro jerezano representa «el premio de mi vida». El jurado ha reconocido su figura «en el año de su retirada de los ruedos» y ensalza también los valores de «esfuerzo, entrega y capacidad de superación dentro y fuera de los ruedos» que encarnan la personalidad y trayectoria de Padilla. «Recibo tanto del pueblo que jamás imaginé que las instituciones también pudieran acordarse de mí. No merezco tanto cariño, de verdad, yo no he dado ni la mitad de todo lo que he recibido a lo largo de mis 25 años de profesión. Pero estoy tremendamente feliz. Es el mejor broche posible a mi carrera», afirmó Padilla.

El Nacional de Tauromaquia, que este año cumple su sexta edición y está dotado con 30.000 euros, reconoce la labor de una persona, entidad o institución durante la temporada española de 2018 en el ejercicio de las diferentes actividades y manifestaciones de la Tauromaquia. Pero más que a una temporada en concreto, para el Ciclón de Jerez este premio viene a reconocer «toda esa enseñanza» que ha ido adquiriendo desde que con solo ocho años decidiera que quería ser torero, «la ética y los valores adquiridos» de una profesión que ha vivido «intensamente», añadió Padilla, que se encuentra en México donde pondrá fin a la temporada de su adiós a los ruedos.