Alumnas entregadas y con muchísimas ganas de compartir un rato de baile con Olga Pericet hacen posible el ambiente relajado del programa formativo del Festival de la Guitarra en el ámbito del baile flamenco. Gracias a esta buena energía y a la profesionalidad de la protagonista de esta formación, están abordando el arte de la bata de cola de una manera bastante amplia para el poco tiempo con el que realmente cuentan. «Esa es mi sensación. Siempre me queda poco tiempo para todas las ganas y cosas por dar que tengo», afirma la bailaora.
En este curso, Olga Pericet está profundizando, sobretodo, en el manejo de la bata de cola como elemento escénico. Los dos primeros días han abordado el estudio y coreografía de la técnica de bata de cola y hoy van a desarrollar la jornada en un espacio más amplio «para que la bata de cola se convierta en lo que queramos, bajo nuestra imaginación y para que ellas, como intérpretes, individualmente, saquen movimientos nuevos, en base a lo que han aprendido y a lo que ellas les gustaría que fuese la bata de cola», indica Pericet.
El perfil de las más de 15 alumnas que participan en el taller es muy heterogéneo. Hay alumnas procedentes de distintos lugares de España y del mundo, lo que otorga cierta importancia al festival, esto es sinónimo de que está creciendo. Pero también hay mucha demanda por parte de las cordobesas, «esto es algo que a mí me encanta porque vengo muy poquito a Córdoba y contar con gente de mi tierra me llena de ilusión», confiesa la cordobesa. Olga Pericet intenta siempre que sus alumnos disfruten y sientan el flamenco a la vez que aprenden. Espera que en otras ediciones puedan disfrutar de sus clases un mayor número de personas. Mientras más visible sea el festival y más cabida tenga, mejor. Además, le encantaría que el baile flamenco tuviera un hueco mayor dentro de un festival como este.
