Los portavoces de los tres grupos de la oposición municipal del Ayuntamiento de Pozoblanco, Rosario Rossi (PSOE), Miguel Calero (IU) y Pedro García (Cs), alertaron ayer en una rueda de prensa conjunta del peligro que se cierne sobre las arcas municipales tras la aprobación el lunes del borrador de presupuestos para este año que calificaron de «no equilibrado, con exceso de gasto y con una previsión de ingresos que no corresponde con la recaudación prevista».

Los portavoces, que volvieron a criticar la falta de diálogo del gobierno local del PP con sus partidos para sacar adelante los presupuestos del 2020, afirmaron que las cuentas municipales se basan en unos ingresos irreales. Para justificarlo explicaron que se cuentan como ingresos 6 millones de euros procedentes del cobro del IBI; sin embargo el equipo de gobierno -dijeron- toma como referencia los obtenidos en el 2017 cuando hubo una revisión catastral. A día de hoy, según la oposición, esos ingresos no superarán los 4.166.000 euros. Ese es según la oposición el problema de Pozoblanco: «que figuran 2 millones ficticios de ingresos, pero no figuran 2 millones ficticios de gasto». En este contexto pidieron contención del gasto corriente ya que según sus datos, en los últimos años los remanentes del Consistorio han ido bajando de 12.200.000 euros en el año 2017 a 7.900.000 euros en el 2020, «todo ello sin haber realizado una sola de las inversiones previstas como el mercado de abastos».

En este sentido los portavoces municipales criticaron que el proyecto del mercado de abastos hasta el pasado mes de diciembre tenía una dotación de 2.300.000 euros y a día 1 de enero de este año «ya no estaban».

A esta circunstancia achacó la oposición de Pozoblanco los problemas que ha habido en el departamento de intervención, que han llevado a que la plaza de interventor esté vacante desde el pasado 31 de enero. Igualmente, denunciaron que «los colectivos sociales que no actúan bajo el criterio del gobierno local tienen problemas».