El equipo de gobierno de la Diputación, compuesto por PSOE e IU, aprobó ayer en solitario el presupuesto de la institución provincial para el año 2018, que asciende a 238.930.296 euros, lo que, según indicó el responsable de Hacienda, Salvador Blanco, supone un incremento del 10,87% respecto al año anterior. Por su parte, el presupuesto consolidado, que es el que incluye los organismos y entidades autónomas de la institución, se sitúa en 287 millones, lo que supone una leve bajada (del 0,41%) sobre el ejercicio precedente. Ninguno de los grupos de la oposición respaldó la propuesta. El PP votó en contra, mientras que Ciudadanos y Podemos se abstuvieron.

El equipo de gobierno defendió el proyecto presentado argumentando que es una apuesta por los servicios sociales y las personas «ya sea por medio de políticas directas o a través de los municipios». Explicó también Blanco que con la aprobación en diciembre del presupuesto, se cumple con el compromiso de tenerlo aprobado antes de que acabe el año, para que con el nuevo ejercicio se pueda empezar a ejecutar. Blanco destacó el importante aumento de la aportación de Diputación al Instituto Provincial de Bienestar Social, que llega al 14%, con lo que pasa de 33 a 45 millones, representando un aumento en el presupuesto del IPBS de casi el 12%; el impulso al plan de empleo de la zona norte de la provincia, que duplica su cuantía y llega a los 600.000 euros, o la apuesta por la mejora de las dotaciones de los parques de bomberos, entre otras.

Explicó asimismo el diputado de Hacienda que las inversiones aumentan un 3,75%, con lo que se destinarán más de 45 millones. Como ejemplo, citó Blanco el caso de los Planes Provinciales, a los que se destinan 11,4 millones divididos en dos partes: la primera para obras nuevas y la segunda para culminar las ya iniciadas.

Enumeró también el vicepresidente tercero de la Diputación algunos detalles de las cuentas de los organismos autónomos, entre los que destacó el Consorcio de Bomberos, que recibirá este año 10,92 millones de euros (un 4,96% más), con los que se pretende renovar parte de la flota y la mejora de algunos parques comarcales, como el de Montoro. Asimismo, indicó que la Diputación ingresará 18,34 millones que después transferirá a Epremasa, lo que contribuirá a que los municipios paguen un 5% menos por la recogida de basura.

También defendió las cuentas del 2018 el portavoz de IU, socio de gobierno, Francisco Ángel Sánchez, quien apuntó que la incertidumbre de los presupuestos del Estado ha hecho más difícil la confección de las cuentas provinciales, que, dijo «han sido fruto de mucho trabajo con los alcaldes de la provincia». Para Sánchez, una de las prioridades era el empleo, pero también recordó los incrementos experimentados por las áreas que son competencia de su grupo, como Caminos, Cultura, Juventud o Igualdad.

En el debate, el Partido Popular mostró su negativa al documento porque, según explicó el portavoz, Andrés Lorite, no se ha atendido ninguna de sus 120 propuestas, y porque considera que el documento no responde a la realidad de la institución, quejándose del escaso nivel de ejecución del anterior presupuesto. Aseguró el portavoz popular que muchas partidas se han copiado directamente del presupuesto del año pasado, porque no llegaron a ejecutarse.

Salvador Blanco replicó que el nivel de ejecución es superior al periodo de gobierno del PP e indicó que muchas de las peticiones planteadas por los populares están incluidas en los presupuestos, pero que no podían aprobarlas todas, porque eso sería «aprobar el presupuesto del PP».

Ciudadanos, por medio de su portavoz, José Luis Vilches, explicó la abstención de su grupo en que no se ha hecho un seguimiento real de la materialización de las cuentas anteriores y que sería necesario llevar a cabo reuniones mensuales para ver el grado de cumplimiento.

Por su parte, Ganemos no respaldó las cuentas, según explicó Ángeles Aguilera, por considerar que durante el año 2017 se habían alcanzado acuerdos entre el equipo de gobierno y este grupo y no se han llevado a cabo.

Durante el debate del presupuesto se tuvo que interrumpir el pleno para poder comprobar que un incremento de 3,9 millones se había incluido en el documento final, tal y como se había aprobado en la comisión previa, pues no aparecía en la documentación recibida por los grupos. Finalmente el secretario de la sesión confirmó que, efectivamente, estaba incluida.