La Junta de Andalucía ha terminado desestimando la petición que inició en el 2012 el Ayuntamiento de Monturque para modificar la línea delimitadora entre su municipio y los términos de Cabra y Montilla.
Así lo detallan sendas órdenes publicadas ayer por las que se establecen, mediante actuaciones de replanteo, las lindes entre estas tres localidades, que fueron formalmente acordadas por sus representantes en 1870.
En el 2012, la Dirección General de Administración Local dio traslado a los ayuntamientos afectados de una «propuesta de Orden de datos identificativos de la línea delimitadora» entre sus términos municipales, a la que el Consistorio monturqueño, dirigido -como ahora- por la socialista Teresa Romero, respondió expresando su disconformidad y aportando una serie de alegaciones.
Entre las principales, el Ayuntamiento de Monturque destacó que, según la documentación del Instituto Geográfico y Catastral de 1900, «el Arroyo Frío constituye la línea delimitadora entre Montilla y Monturque, habiendo sido asumido tal accidente geográfico como límite por ambos ayuntamientos», de ahí que abogara por que fuera «respetado», ya que venía «siendo aceptado desde hace más de un siglo».
Desde Monturque se hizo hincapié en que «la negación de este elemento geográfico como límite conllevaría graves perjuicios para el Ayuntamiento y considerables inconvenientes de gestión administrativa».
Por este motivo, el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía se vio en la necesidad de redactar dos nuevos informes -uno sobre los límites con Montilla y el otro relativo a Cabra- que concluyeron a mediados del pasado mes de enero y que, tras diversas consideraciones de tipo técnico, han llevado al vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, a conferir la consideración de «definitivas e inamovibles» las líneas que delimitan los términos de Montilla, Cabra y Monturque y que se acordaron en 1870.
