La Gerencia de Urbanismo concederá seis meses más de plazo para la ejecución de las obras de la ronda Norteque debían estar acabadas en noviembre del 2020. El consejo rector del organismo municipal, que tendrá lugar el miércoles, tiene previsto aprobar la modificación del contrato de obras relativas al proyecto de ejecución del tramo que va de Fuente de la Salud a la Nacional 432, que era de iniciativa privada pero que se quedó parado con la crisis en el 2008 y Urbanismo lo retomó en septiembre del 2019. La modificación no supondrá un encarecimiento de la obra, pero sí un aumento del plazo inicial, que pasará de 14 a 20 meses. La modificación responde a las obras necesarias para el desvío de la línea eléctrica, que es lo que más dificultades está teniendo en el proyecto.

Vialex Constructora Aragonesa es la empresa a la que Urbanismo adjudicó las obras en diciembre del 2018 por 6,7 millones de euros. El contrato fue formalizado en marzo del 2019 pero hasta septiembre de ese año no empezaron los trabajos. Paralelamente, en junio del 2019, el organismo municipal encargó a la UTE Getinsa-Euroestudios-Gis Ingeniería Civil el contrato de servicios de dirección de obra. Según consta en el informe del servicio de Patrimonio, la UTE pidió en octubre del 2019 la modificación del proyecto, cuyos trámites se iniciaron en mayo del 2020 y concluyen ahora.

La modificación del proyecto tiene relación con una estructura y con las líneas eléctricas de Endesa, que, a su vez, afectan a unidades que están en la parte final de la vía, en la conexión de la N-432 con Agrupación Córdoba. El aumento de plazo es "por el retraso en la tramitación de los proyectos de cambio de línea con Endesa y posterior autorización de Industria", que suele ser un trámite "laborioso", según explica el presidente de Urbanismo, Salvador Fuentes.

En junio de este año, este periódico ya avanzaba que el final del tramo de ronda Norte que depende del Ayuntamiento se retrasará hasta la próxima primavera debido al desvío de líneas eléctricas. Entonces el tramo que iba más atrasado era el que discurre entre el club Mirabueno y el entronque con la CO31 y la avenida de la Agrupación Córdoba. El problema radicaba en que dos de las líneas eléctricas suministran energía a la cementera Cosmos y no pueden desmontarse hasta que la empresa pare la producción, hecho que estaba previsto para este mes. En agosto, la obra superaba ya la mitad de ejecución y la adjudicataria echaba la segunda capa de asfalto.