Después de su discurso, José María Bellido respondió a las preguntas formuladas por los asistentes, que fueron resumidas por el redactor jefe de CÓRDOBA, Rafael Aranda.

-¿Qué hará para mejorar la iluminación de Córdoba en estos días de tantos apagones?

-Es casualidad, pero cuando termine este evento hemos quedado con la asociación de vecinos para examinar el estado en el que están los transformadores y poder actuar con Endesa, con el impulso de su Ayuntamiento y de su alcalde, para resolver un problema que, aunque no está en nuestras manos, sí vamos a ir de su mano a hablar con Endesa y con quien haga falta para que eso se arregle.

-¿Qué va a hacer para reconducir la relación con los sindicatos, que han mostrado su malestar por haberse quedado por primera vez sin voto en las empresas municipales?

-Hay una sentencia del Tribunal Constitucional que no solo dice que en todos los organismos que son de extracción parlamentaria, en este caso, plenaria o de junta de gobierno local, tienen que estar presentes todos los grupos municipales, lo cual ya es una dificultad previa, porque algunos de esos consejos son de 13, que puede estar más o menos ajustada con la proporcionalidad del Pleno; otros son menores y es muy difícil que seis grupos que componemos el Pleno estemos presentes en todos los consejos rectores y que, además, haya presencia de sindicatos y movimiento ciudadano. Las matemáticas no cuadran, sobre todo, con algo que también dice el Constitucional, que es la proporcionalidad de la representación en el Pleno. En todo caso, además, habría que abrir otra reflexión sobre si también tendrían que participar otro tipo de organizaciones como las asociaciones empresariales, que nunca han estado presentes y que también forman parte de la concertación social. Pero hay un problema añadido, que es que lo segundo que dice el Constitucional es que no pueden participar otras personas que no sean las que han elegido los ciudadanos con su voto. ¿Qué vamos a proponer? Primero, crear consejos asesores que faciliten la participación del movimiento ciudadano y de toda la concertación social. Y si la duda que tienen respecto a su participación tiene que ver con el papel que van a tener las empresas, vamos a ofrecer un pacto por las empresas públicas.

-Una de las 23 medidas que anunció para los 100 primeros días de gobierno fue cambiar el nombre de tres calles, ¿sigue adelante con la idea, a pesar de que el Pleno se ha posicionado en contra?

-El Pleno no se ha posicionado ni a favor ni en contra. El otro día no se aprobó nada. Con lo cual, tenemos las manos bastante libres. Hemos encontrado el respaldo legal de la secretaría general del Pleno, que dice que el plan que queremos llevar a cabo es perfectamente acorde a toda la legislación vigente, y el de la Consejería de Cultura, que no deja de ser el órgano que también tiene que vigilar por el cumplimiento de la ley de Memoria democrática. Con lo cual, seguiremos avanzando y espero que podamos alcanzar acuerdos con el resto de fuerzas políticas para llevarlo a cabo.

-En el mundo económico y empresarial el tiempo es un factor de suma importancia, ¿para cuándo Córdoba podrá tener ordenada urbanísticamente la primera parcela de gran dimensión para uso de grandes operadores logísticos?

-Ahí hay tres asuntos que tenemos que ir ordenando. Uno es la innovación que hay iniciada del Plan General de Ordenación Urbana para contar con un nuevo sistema logístico en la salida de la carretera de Sevilla. Algo que ya se estaba tramitando por el anterior equipo de gobierno y que tenemos que acelerar para aprobar cuanto antes. Luego hay otra decisión, también estamos ya al habla con la Junta de Andalucía a través de Rafael Merino, antiguo alcalde de Córdoba y responsable de la Agencia de Puertos, que es desatascar una situación que hay en El Higuerón, que no deja de ser curiosa. Es que haya demanda de compra de parcelas logísticas para operar en nuestra ciudad y que, sin embargo, nos encontremos con una supuesta limitación urbanística, que hace que solo se puedan alquilar o concesionar. Estamos trabajando para ver si, de acuerdo con la nueva legislación, directamente podemos proceder a autorizar la venta de esas parcelas o si hay que hacer algún tipo de modificación urbanística que permita que se vendan, porque eso sería una magnífica noticia para Córdoba.

-¿Qué papel debe tener toda la periferia en el presente y futuro de la ciudad? ¿Se podrán extender los servicios básicos?

-Le hemos dado ya su sitio en el gobierno. No solo hemos respetado el órgano que había hasta ahora de administración de barriadas periféricas, sino que lo hemos reforzado con la presencia también de Encinarejo, encargándole al actual alcalde que lo dirija. El reto fundamental yo diría que son dos, uno, el de la movilidad, que ya estamos trabajando con el Gobierno de la nación para hacer que el metrotrén sea mucho más barato y, por tanto, mucho más accesible. Estoy convencido de que en el último trimestre del año vamos a poder firmar el convenio con Renfe para bajar ese precio del billete. Por otra parte, la dotación de servicios básicos. Hay un avance en la legislación de la Junta de Andalucía durante la anterior legislatura, pero, sobre todo, hay una propuesta que ya está sobre la mesa de una modificación de las leyes urbanísticas que permita dotar de servicios básicos a todas estas parcelaciones. En el momento que tengamos la legislación andaluza adaptada, desde la GMU se agilizará.

-¿Cuándo empezará a trabajar en su plan de aparcamientos, sobre todo en ese plan estrella llamado Puerta de Córdoba?

-El plan de aparcamientos está aprobado desde hace mucho tiempo. Seguramente, lo primero que tengamos que hacer es una revisión. Y luego, Puerta de Córdoba es una prioridad para nosotros. En este año es imposible, porque en los presupuestos que nos dejaron aprobados no hay fondos. A partir del año 2020, empezaremos a trabajar.

-¿Qué hará para atraer empresas a la ciudad?

-La atracción de empresas creo que deviene de un clima de confianza por la parte empresarial, de que invertir en un territorio va a ser rentable y va a tener futuro. En lo que estamos trabajando desde ya es en generar ese clima de confianza. ¿Cómo se genera? Con todo un plan de ciudad. En primer lugar, tenemos que tener un plan estratégico de ciudad para que los inversores y las empresas sepan en qué va a trabajar este ayuntamiento y si va acorde también a su plan de empresa. En segundo lugar, tenemos que garantizarles seguridad jurídica. Aquí hemos vivido ejemplos, en los últimos años, de inseguridad jurídica ligada a empresas. Algunos que tenemos, por cierto, intención de resolver próximamente. Ha habido empresas que, estando instaladas en Córdoba con toda su documentación, tanto urbanística como ante la Junta de Andalucía, en regla han visto cómo se pretendían modificar las normas urbanísticas para sacarlas de la ciudad. Evidentemente, eso no es muy atractivo. En tercer lugar, con la colaboración público-privada. Hay muchos proyectos que están pendientes de actuar en Córdoba, que estaban esperando este cambio de modelo para empezar a actuar y esa confianza y esa colaboración publico-privada se está recuperando. Penúltimo, la agilidad administrativa. Cualquier proyecto que venga a Córdoba tiene que tener una seguridad en los plazos. Lo último, tenemos que intentar ser fiscalmente más atractivos.

-¿Cómo le gustaría ser recordado dentro de cuatro años?

-Me gustaría que me recordaran, por lo menos, con cariño (risas). Más allá de la broma, espero que después de cuatro años todos sigamos viniendo aquí y saludándonos con cariño. Espero, y ese es el principal objetivo que tengo, que dejemos un proyecto de ciudad, un plan estratégico marcado. No sé cuánto tiempo seré alcalde, lo que sí tengo es el deber de dejar en estos cuatro años, que son los mínimos que tengo asegurados, un plan de ciudad para que, venga quien venga después de mí, haya unas líneas claras que nos marquen un rumbo, porque eso es de lo que ha adolecido la ciudad en los últimos 20, 25 o 30 años. Nos ha faltado un proyecto común en el que todos nos sintamos parte, que nos sirva para avanzar. Y espero que, después de cuatro años, por lo que sea recordada la labor de este gobierno es por dejar esa estrategia de ciudad perfectamente diseñada.