La inauguración del mercado medieval ha llegado acompañada de polémica. El colectivo de artesanos y trabajadores de la zona de la Calahorra, que colocan sus puestos durante todo el año en dicho enclave, denuncia «la falta de apoyo» por parte del Ayuntamiento de Córdoba, que, según denuncian, no les ha permitido integrarse dentro del mercado y les han reubicado en una zona alejada del turismo y del público que se prevé este fin de semana en el lugar, atraído por el mercado medieval.

Hace dos semanas, el colectivo envió un escrito al Ayuntamiento para pedir que tuvieran en cuenta a este grupo de trabajadores de cara a la organización de la nueva edición de esta feria medieval y comunicarle que su idea era adaptarse y cumplir con todos los requisitos necesarios, como vestuario y decoración. «No tuvimos respuesta hasta hace tres días y en ella se nos decía que no podemos montar», indican desde el colectivo. «La única opción que nos han ofrecido era pagar un dinero a la empresa que organiza el mercado», remarcan los afectados.

Por tratarse de artesanos de Córdoba, se les ofreció un pequeño descuento, pero se negaron, ya que pagan anualmente sus tasas al Ayuntamiento para trabajar en esa zona. «Todos los años nos hemos integrado con el mercado sin ningún problema y sin pagar nada extra porque nosotros ya pagamos las tasas todo el año». Han sido reubicados a la altura del Puente de San Rafael, lejos de su habitual zona de trabajo y, por extensión, del mercado medieval. «En nuestro decreto firmado con el Ayuntamiento se indica que podemos ser reubicados cuando se celebre un evento. Cuando esto pasa, nos movemos a zonas más cercanas al puente romano pero esta vez nos han ubicado en un lugar en el que no vamos a ganar nada por la feria medieval». El colectivo pide al Ayuntamiento que regule adecuadamente esta tradición ya que, según su criterio, «se producen bastantes irregularidades».