Contra los prejuicios, orgullo. Córdoba se llenó ayer de color para celebrar una fiesta a favor de la diversidad. «Ames a quien ames, Córdoba te quiere», repetía micrófono en boca el zancudo que dirigía el cotarro desde las alturas. Con el ambiente caldeado por los comentarios homófobos procedentes de la extrema derecha, los organizadores de la marcha aprovecharon la ocasión para mantener vivo el orgullo, pero también la memoria «de un colectivo históricamente perseguido e invisibilizado que ahora se rearma en respuesta de los movimientos excluyentes, que combatirá las terapias aversivas y defenderá la educación en diversidad y el derecho a ser, amar y a expresarnos en libertad». Más de dos mil personas acudieron a la cita, secundada masivamente por adolescentes y jóvenes, entre los que se dejaron ver numerosos políticos de distinto signo, entre ellos, la exalcaldesa y concejal socialista Isabel Ambrosio; la teniente alcalde de Ciudadanos, Isabel Albás; la concejala de Podemos Cristina Carvajal; la concejala de IU Alba Doblas, y el delegado del Gobierno, el popular Antonio Repullo, que dejó al cargo de la bandera a la líder de NNGG Cintia Bustos. Vox, por su parte, estuvo presente en las pancartas de los manifestantes, que les lanzaron mensajes directos como «Abascal, métete tú en el armario».
Este año, la exatleta cordobesa Belén Recio fue la encargada de leer el manifiesto en la plaza de la Corredera, con un lema de claro contenido político en tiempo de pactos postelectorales: «Con nuestros derechos no se negocia». Además, incluía exigencias al Congreso de los Diputados como «la aprobación urgente de una ley estatal de igualdad Lgtbi y trans, «que lleva encallada en sede parlamentaria desde hace meses». Belén Recio mostró su orgullo por haber sido elegida para encabezar la lectura «porque el amor es amor y todos tenemos que luchar por la igualdad y por los derechos», recalcó.
Con un recorrido más largo que otros años, la manifestación fue sumando gente y apoyos, a la par que caras de indiferencia e indignación, pero sobre todo, de orgullo. Así, partió desde la Diputación, recorrió la avenida de Ronda de Tejares para enfilar después por La Victoria y acabar en La Corredera, donde los asistentes tuvieron la ocasión de disfrutar hasta avanzada la noche de varias actuaciones musicales y del arte transformista de Imperio Reina y Carlota.
Este año se cumplen 50 años de la rebelión de Stonewall, que tuvo lugar el 28 de junio de 1969 en Nueva York y que marcó el levantamiento de las personas Lgtbi a favor de la integración social de la diversidad. Coincidiendo con este aniversario, la marcha de ayer rindió homenaje a las personas transexuales y travestis pioneras del movimiento del Orgullo.
Imágenes de la manifestación de ayer en Córdoba. Fotos: CHENCHO MARTÍNEZ
