El endurecimiento de la normativa penal ha dado los últimos meses nuevos instrumentos a los jueces para actuar contra el fenómeno de los robos de cable de cobre, todo ello para evitar casos como el de A.D., detenido el 7 de septiembre del 2011 por el robo de unas planchas metálicas y al que le constaban 47 antecedentes policiales. En el último año, se condenó a tres personas a 6 meses de cárcel por la recepción de material de cobre robado de una instalación eléctrica en Fátima, un material cuya venta solo supuso unos 480 euros, pese a que su valor era de 1.062 euros y los desperfectos causados en la instalación sumasen 16.725 euros.

También en el último año se ha condenado en Córdoba a cuatro personas de nacionalidad rumana por el robo de buena parte de la instalación eléctrica de El Arcángel, en el 2009, delito que causó casi 28.000 euros en daños y supuso 91.000 euros en gastos para reponer la red del estadio de fútbol. En este robo, los condenados también sustrajeron un camión y una furgoneta para transportar el material.