El líder del PP andaluz y candidato a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Javier Arenas, pidió ayer en Córdoba el voto para los populares porque lo que le hace falta a la ciudad son "gobernantes leales" y que "no le den la espalda". En este sentido, y dirigiéndose al alcalde y candidato al Parlamento, José Antonio Nieto, aseguró que "todo lo bien que lo estás haciendo ha sido con la Junta en contra" --"pasé vergüenza con lo de la Davis" , confesó--, por lo que ofreció, frente a la postura del Gobierno socialista, su "compromiso" y el del presidente del Gobierno de la nación, Mariano Rajoy, con Córdoba y sus proyectos. Eso sí, sin llegar a concretarlo con detalle. Habló desde luego de apoyar proyectos como el centro de convenciones, la Agrópolis --"nos volcaremos", dijo--, el metro tren y de contar con Córdoba para su proyecto Andalucía Universal una gran exposición anual sobre las culturas que han poblado Andalucía y a modo de las Edades del Hombre, pero hasta ahí. Y es que advirtió de que "se han terminado las promesas fáciles" porque "sé que me encontraré --de acceder a la Junta-- unas cuentas públicas complicadas y tengo que medir mis palabras". "Vienen tiempos difíciles", insistió Arenas.

En la misma línea, Nieto insistió en que Córdoba necesita un gobierno del PP que "no la margine", y es que aseguró que los socialistas, con el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, a la cabeza, "no es que no nos ayuden, es que están bombardeando" los proyectos que se quieren poner en marcha. Por eso consideró "vital" para Córdoba el cambio "o la crisis va a ser muy larga", advirtió al tiempo que recordó las "cien mentiras" de la Junta con Córdoba en los últimos ocho años, cifradas en 4.000 millones de euros.

En clave andaluza, Arenas, se comprometió si gobierna a promover una iniciativa para que los partidos políticos den cuenta cada seis meses en la Cámara andaluza de su relación con las entidades financieras para evitar "privilegios". Y también añadió que su gobierno reduciría las subvenciones que reciben partidos, sindicatos y organizaciones empresariales. "Son tiempos difíciles" y hay que pedirles "sacrificios a todos, menos a los parados y los pensionistas", dijo.

El candidato a la Presidencia también hizo referencia al caso de los expedientes de regulación de empleo (ERE) fraudulentos, resaltando el "daño" que le ha hecho a Andalucía. Aseguró, además, que si gobierna contribuirá a que se sepa la verdad, a poner en marcha una nueva ley de Hacienda Pública para que no se gaste un euro sin el control de los funcionarios, a implantar un cuerpo de interventores y a que todo lo que se recupere vaya a un fondo de emergencia social para familias sin ingresos.

CITA DEL DOMINGO Arenas, que recordó que el PP ganó las elecciones municipales y generales en Andalucía, se mostró convencido de que el domingo harán "historia a lo grande", aunque, por si acaso, apeló a una "participación masiva a favor del cambio, la ilusión y el futuro".

Por último, señaló que "austeridad, diálogo y reforma" serán las "tres grandes palabras" de su gobierno, al tiempo que aseguró que los únicos recortes que llevará a cabo irán contra "los derroches, abusos, el paro y los privilegios" en Andalucía. También aseguró que si es presidente de la Junta su partido y los militantes no tendrá ningún tipo de privilegio. "Seré un presidente para todos", concluyó.