Las autoridades italianas han informado este lunes de que ya son ocho las víctimas mortales después de que el domingo se produjera el desprendimiento del glaciar de la Marmolada, en los Alpes italianos.

Los servicios de emergencia, que han tenido que suspender las labores de búsqueda debido a las malas condiciones meteorológicas, han alertado de que las posibilidades de encontrar supervivientes "se están reduciendo a cero".

No obstante, los equipos que trabajan en la zona han logrado hallar con vida a cuatro personas, si bien otras quince siguen aún en paradero desconocido, según informaciones del diario 'Corriere della Sera'.

"No tenemos la cifra definitiva, pero estimamos que entre diez y quince personas siguen atrapadas debajo de la zona del desprendimiento. Es casi imposible que vuelvan con vida", ha explicado Alex Barattin, portavoz de los equipos de rescate.

Así, ha alertado de que la situación es "crítica" dado que "existe la posibilidad de nuevos derrumbes y nadie puede entrar en el glaciar". "Estamos monitorizando todo con drones y cuando vemos algo con mayor detalle intervenimos con un helicóptero", ha explicado antes de confirmar que las labores de búsqueda y rescate se reanudarán "tan pronto como el tiempo lo permita".

A lo largo de la noche, los servicios de emergencia han mantenido sus operaciones de búsqueda para tratar de localizar a los desaparecidos. Informaciones preliminares indicaban que las autoridades habían localizado al menos seis cadáveres, entre ellos los de tres personas de nacionalidad italiana y una de origen checo, según fuentes policiales. Una pista de hielo en Canazei sirve de improvisada morgue.

Un portavoz de la Dirección Nacional de Salvamento Alpino, Fabio Bristot, ya admitía el domingo por la noche que "será difícil encontrar a alguien con vida".

Los equipos de búsqueda han utilizado drones equipados con cámaras térmicas para tratar de localizar a los desaparecidos, mientras las familias esperan algún tipo de noticia desde los Dolomitas, convertidos en epicentro de la tragedia. El primer ministro, Mario Draghi, ya ha llegado a Canazei para analizar la situación junto al jefe de Protección Civil, Fabrizio Curcio.

Los investigadores sospechan del desprendimiento de un serac, un bloque de hielo dentro de un glaciar, y que éste arrasó con todo a su paso, incluidos grupos enteros de montañeros. Las autoridades temen que no se pueda incluso identificar a todas las víctimas, ya que el alud de hielo y piedras ha provocado graves daños en los cuerpos, informa la cadena Rai.

Los municipios de la zona han emitido órdenes para evitar la zona afectada hasta que se hayan completado las tareas de búsqueda y el área vuelva a ser segura.

El desprendimiento, según las primeras informaciones de Salvamento Alpino, se habría producido cerca de Punta Rocca, en la vía de ascenso de la ruta normal para llegar a la cumbre donde había varios senderistas.

Los cuerpos de las víctimas que fueron recuperados del hielo han sido trasladados al palacio de deportes de la localidad cercana de Canazei y se ha activado un equipo de psicólogos para asistir a los familiares.

Los heridos, una de ellas en condiciones críticas, han sido trasladados a los hospitales de Trento, Bolzano, Belluno y Treviso.

Para los investigadores, la avalancha en la Marmolada es "un desastre inimaginable, una carnicería por lo que será muy difícil identificar la identidad exacta de las víctimas porque los cuerpos quedaron desmembrados".

Récord de temperatura

Precisamente este sábado en la Marmolada se alcanzó el récord de temperatura, con unos 10 grados en la cima, explicó el presidente de la región de Véneto, donde se encuentra la parte del grupo montañoso de la Marmolada.

La tragedia vuelve a hacer reflexionar sobre el calentamiento global que está haciendo desaparecer los glaciares alpinos. Según el experto del Centro Italiano de Investigación (CNR) Roberto Colucci, volverán a suceder estos episodios pues de acuerdo con un estudio que publicó recientemente "dentro de 25 o 30 años el glaciar de la Marmolada no existirá".

"A esta velocidad, probablemente sucederá antes. La proyección más general apunta a que en 2100, en el mejor de los casos, habrán desaparecido el 70% de los glaciares alpinos, en el peor el 96%. Por debajo de los 3.500 metros, en cambio, dentro de veinte años no habrá nada más porque glaciares como el de la Marmolada están ahora en total desequilibrio", explicó Colucci a los medios.

Zaia y el presidente de la región del Trentino Maurizio Fugatti, siguen constantemente la emergencia y Fugatti está llegando a Canazei, donde se ha establecido un punto operativo para gestionar la emergencia.

Según los testimonios, el trozo de glaciar se partió en dos puntos, lo que se conoce como seracs, y generó un derrumbe de casi trescientos metros de ancho de hielo y piedras que arrasó todo lo que había a su paso.

“Escuchamos un ruido fuerte, propio de un derrumbe, luego vimos una especie de avalancha compuesta de nieve y hielo descendiendo a gran velocidad y ahí me di cuenta que algo grave había pasado. Con binoculares se puede ver la rotura desde aquí", explicó a los medios uno de los gestores del refugio Castiglioni Marmolada, que presenció el accidente.