Moda

El alquiler de la moda de lujo se dispara: "¿Por qué gastar un montón en un 'look' de fiesta que no volverás a repetir?"

En la jura de la Constitución de su hermana, la infanta Sofía puso el foco en un sector en expansión en España. Da fe Blanca Mayoral, CEO de Lend the Label, una de las marcas más reconocidas del panorama nacional

Blanca Mayoral, fundadora y CEO de la firma de alquiler de moda de lujo Lend the Label.

Blanca Mayoral, fundadora y CEO de la firma de alquiler de moda de lujo Lend the Label. / ANDRÉS ALCÁZAR

Laura Estirado

El día que Leonor juró la Constitución, la infanta Sofía marcó perfil con un vestido alquilado de la firma preferida de los 'royals' británicos, poniendo en valor uno de los sectores de la industria textil en plena expansión en España: el del alquiler de la ropa de lujo. Su modelo, de Erdem Moralioglu, costaba 1.770 euros, pero ella lo pudo lucir para la ocasión por 268 euros. ¿Si toda una princesa se sube al carro del alquiler de la moda más estilosa y de las firmas más glamurosas, te has planteado por qué no lo puedes hacer tú? ¿Sabías que podrías presumir de vestidazo de firma estas Fiestas por unos 80 euros?

"¿Por qué gastar un montón en un 'look' de fiesta que seguramente no vas a volver a ponerte?". Con esta pregunta sintetiza el germen de su empresa Blanca Mayoral, fundadora y CEO de Lend the Label. En solo dos años, lo que empezó siendo "un burro con 10 vestidos en el salón de un piso de estudiantes", se ha convertido en una de las empresas de 'fashion renting' más famosas del panorama nacional. Tiran de su fondo de armario 'influencers' como las hermanas Pombo o las Lozano, aristócratas como Cayetana Rivera, actrices y presentadoras de televisión, además de empresarias y mujeres que "quieren lucir tendencia y un modelo diferente en sus citas más importantes", detalla.

En 2021, esta malagueña que estudiaba biotecnología, estaba en Madrid terminando unas prácticas en una multinacional. Empezaba a buscar nuevas opciones de futuro, cuando un día con su amiga Ángela González, que venía de la comunicación y el márketing y había hecho un curso de moda de lujo en París, empezaron a fantasear sobre 'un Glovo de ropa', pues iban a salir aquella noche y necesitaban un modelito. "Ojalá nos trajeran un 'look' a casa y mañana se lo llevaran", recuerda.

Referentes

"A raíz de esa idea nos pusimos a estudiar modelos de negocio internacionales que alquilaban prendas por un tiempo limitado", recuerda Mayoral, que asegura que esta idea está "muy asentada" en EEUU desde 2012, donde Rent the Runway es todo un referente [y una empresa unicornio, el sueño de cualquier 'startup', que sin estar en Bolsa supera los mil millones de dólares], o el Reino Unido, con plataformas como HURR o By Rotation. "Todas ellas tienen su propia personalidad, aunque una visión parecida, disminuir la contaminación de la industria textil sin renunciar a los mejores 'looks' y tendencias del momento. En Lend the Label también nos inspiramos en nuestras clientas, la clave del éxito es escuchar qué buscan las nuevas generaciones, cuáles son sus gustos, y todo ello nos sirve para perfeccionar el servicio e incorporar nuevas funcionalidades", observa Mayoral, que hoy dirige en solitario el negocio, junto con un equipo de cinco mujeres.

Dos semanas después de que las hermanas Chen abrieran Borow en la Gran Via madrileña, en Chueca, Lend the Label hizo lo propio en el barrio de Salamanca. Dos plataformas con tienda hoy emblemas del sector del alquiler del lujo, que nacieron a la vez que languidecía el negocio decano de la moda de alquiler en España, La Más Mona (fundada en 2012, el pasado octubre cerró todas sus tiendas y el comercio electrónico). "Llegamos a hablar con su CEO, Polo Villaamil, para que nos asesora en este sector. Ellos se habían especializado en ropa y accesorios de fiesta, pero sin apostar por marcas de lujo. Además, creo que su problema fue que no iba dirigida a un público concreto. Y hoy en día, cualquier chica de 15 años distingue qué es un Louis Vuitton o un Balenciaga, y busca cosas muy concretas", opina la empresaria.

"Nuestra intención es democratizar la moda de lujo, que pueda ser una opción para todas las mujeres, y también hacer que las mujeres puedan compartir y rentabilizar las joyas que tienen en su armario"

Lujo accesible

"Hablando con amigas me di cuenta de que teníamos el mismo problema, multitud de eventos y miles de vestidos en nuestro armario que nos habíamos puesto solo una vez... No queríamos seguir gastando tanto dinero", relata la malagueña, que suma a este problema otros dos. Por un lado Instagram: "Nos hacemos una foto, la subimos, y ya no nos apetece repetir 'look'"; y por el otro, el deseo aspiracional de vestir con firmas de lujo: "La moda de lujo la vemos cada vez más, pero sigue siendo inaccesible para la mayoría de presupuestos".

El burro con 10 vestidos de alquiler de invitada perfecta pronto se quedó corto. La empresa se fue haciendo conocida y los objetivos también se hicieron más ambiciosos. El prioritaro de todos, dar a las prendas más de una vida"Nuestra intención es democratizar la moda de lujo, que pueda ser una opción para todas las mujeres, y también hacer que las mujeres puedan compartir y rentabilizar las joyas que tienen en su armario".

Catálogo con 400 'looks'

Esto último ha sido clave para el éxito de Lend the Label. Si su catálogo ahora mismo está formado por entre 350 y 400 'looks', que "se renuevan casi a diario", no es solo por las prendas adquiridas a las firmas, sino por todas las que las clientas aportan para que se alquilen. "Todas están igual de "impecables", afirma Mayoral. "La gracia es que van cambiando. Tenemos marcas nacionales, como Baymo, Amlul (la de Gala González) o Juan Vidal... e internacionales, tipo Carolina Herrera, Zimmermann, Ralph Lauren, Alexa Chung o Sea New York", enumera.

"Contamos con un departamento de logística que recoge las piezas, las entrega, las vuelve a recoger, las lleva a la tintorería...", detalla Mayoral, que señala que quizá esa es la parte más complicada del negocio, "cuadrar que un vestido que han encargado cinco clientas para las próximas semanas les llegue a tiempo a todas".

"El servicio The Wardrobe permite a cualquier mujer poder dar una segunda vida a sus prendas más queridas, al mismo tiempo que gana dinero y colabora con la moda circular. A lo mejor un vestido le ha costado 500 euros, pero puede recuperar ese dinero, e incluso ganarle más, con el alquiler", detalla la CEO.

Actualmente Lend the Label reparte su negocio 65% en tienda y 35% 'online'. "Pero cada vez la gente pide más por internet, y conocen sus medidas y las tallas. Además, si solicitas un 'look' para casa y luego no te convence, solo pagas los gastos de mensajería", explica.

La clave del éxito

Asegura que les llegan hasta 50 solicitudes al día. Solo hay que rellenar un formulario sobre la prenda, indicando la marca, fecha de compra, precio original y por cuánto la quiere alquilar, y adjuntar una foto. Si es seleccionada por el departamento, pasa al catálogo temporal. "Esta fue la forma en la que hicimos más grande nuestro inventario. Recibimos miles de solicitudes de chicas que querían sacar algo de rentabilidad a sus armarios y apoyar un consumo más sostenible. Diría que este fue el punto de inflexión para hacer crecer nuestro negocio, y lo que nos distingue de la competencia", señala Mayoral, cuya empresa ya está presente en Portugal y aspira a conquistar otros mercados europeos como Italia, donde "existen algunas marcas pero con una logística muy local".

Por ejemplo, un 'look' de unos 3.000 euros de la diseñadora colombiana Johanna Ortiz, aquí lo puedes tener por 170 euros. El alquiler es de viernes a lunes, normalmente. El precio medio ronda los 80 euros de un vestido o conjunto, y si lo adornas con abrigo o capa, sale por 150 euros. También tienen bolsos, normalmente de firmas emergentes que ceden por un tiempo sus colecciones cápsulas exclusivas.

TEMAS