Los niños bujalanceños y sus padres han disfrutado en la celebración del décimo aniversario de la Semana Santa Chiquita. Los actos empezaron con una eucaristía en la catedral de la Campiña, tras la cual se realizó una salida extraordinaria de todos los pasos, acompañados por más de 300 niños y la banda de tambores y cornetas del Imperio Romano, que terminó en la ermita de la Santa Cruz, entre palmas y gran emoción. J.E.