Albergó vivienda para el carcelero y su familia, pero hoy ha dejado de tener ese servicio policial y, tras una importante restauración, ha acogido otros usos públicos. A comienzos de los años 90, mientras se reformaba el edificio de la Casa Consistorial, albergó las oficinas municipales durante un par de años. Hoy aloja en sus salas la biblioteca municipal en su planta baja, y la emisora de radio y ludoteca en la alta.