Nada más pisar la Casa Blanca, Obama anunció el cierre de la prisión de Guantánamo en enero del 2010. Pero es posible que el cierre se demore por la dificultad de recolocar a los presos, ya que el propio Congreso estadounidense es reticente a recibirlos. Algunos países se han ofrecido a aceptar reos. España está dispuesta a acoger a no más de tres.