CITA CON LAS URNAS

La misma cantinela

¿Qué se le puede pedir al futuro equipo de gobierno?

José Luis Rodríguez

José Luis Rodríguez

Ante el 28M conviene hacer un esfuerzo para reponer ilusiones y vencer esa pereza tremenda que conduce a la abstención. Para eso habrá que dejar de lado dos pensamientos. El primero se refiere a la impresión, si no certeza, de que los dos últimos gobiernos municipales, el de PSOE-IU y el del PP-Ciudadanos, apenas han traído avances a la ciudad de Córdoba. El segundo, al disgusto de pensar que las municipales se plantean como un laboratorio de cara a las generales.

Isabel Ambrosio no consiguió un equipo fuerte que le permitiera dejar huella en la capital. José María Bellido sí ha tenido un entorno más cohesionado, pero, sea por la pandemia, sea por la lentitud que arrastra Córdoba para todo, no puede presentar grandes resultados o cumplimientos de su programa. Eso sí, el equipo de Bellido está consiguiendo cerrar proyectos muy antiguos, desde el Parque de Levante hasta el Centro de Convenciones del Parque Joyero entre otros. La gran baza del gobierno local saliente responde a una situación sobrevenida que es la futura Base Logística del Ejército de Tierra, una gran oportunidad.

Ahora, Bellido se ha merendado a Ciudadanos y trabaja por la mayoría absoluta con una lista en la que figuran sus principales colaboradores y algunos añadidos de fuera que, la verdad, no se entienden en clave electoral, como tampoco el empeño del candidato Hurtado de rescatar el proyecto del Palacio del Sur. ¡Hombre, Antonio!

¿Qué cabe esperar de la próxima Corporación municipal? Los ayuntamientos tienen competencias limitadas, pero muy cercanas, capaces de cambiar radicalmente la calidad de vida de los ciudadanos. Les sobra dinero, vemos año tras año desde hace décadas que no tienen capacidad para gestionar con agilidad los recursos que les quedan en caja una vez descontados el gasto corriente y de personal.

¿Qué se le puede pedir al futuro equipo de gobierno? Que mejore las condiciones de la ciudad, la limpieza, el transporte, el cuidado de los parques, el abastecimiento y saneamiento de agua. Que preserve el patrimonio en un sentido amplio, afrontando el desastre derivado del turismo de masas, la suciedad, el ruido y una hostelería invasiva en los veladores. Que resuelva problemas: estacionamiento, accesibilidad, atención a los ciudadanos. Que cree un hábitat adecuado para niños y mayores. Que fomente la vida cultural, que cuide los colegios, que evite la brecha digital. Que intensifique su acción en los barrios deprimidos, entre las personas que necesitan atención social. Que la ciudad tenga condiciones para un desarrollo empresarial del que surjan empleos de calidad y que nuestros jóvenes talentos no tengan que emigrar... ¿Mucho pedir? Será siempre la misma cantinela, pero es una cantinela que nos importa.

* Periodista