Ganar al Zuazo. El mensaje es el objetivo. Después del revés en la última jornada, el Adesal Córdoba se ha juramentado para conseguir un triunfo que reconduzca su trayectoria en la fase por la permanencia en la Liga Guerreras Iberdrola, máxima categoría femenina del balonmano español. El sábado, en su fortín de La Fuensanta, reciben al Zuazo a las 20.00 horas y no pueden permitirse un tropiezo.
Rafael Moreno, su entrenador, admite que hubo decepción por lo ocurrido en la última cita liguera, pero insta a todo el grupo a pasar página porque el pasado no se puede mover. "Durante 24 horas le di vueltas a lo que nos pasó con el San José Obrero, pero después pensé en el siguiente partido", afirma el técnico, que ha trasladado a sus jugadoras una proclama de confianza y ambición. Sabedor de que aún quedan cuatro batallas para conseguir el objetivo de la permanencia en la máxima categoría del balonmano femenino nacional, está apretando las tuercas emocionales para abordar el tramo decisivo.
Moreno, sin dar nombres, afirma que "hay cuatro equipos involucrados para luchar por dos plazas de descenso, aunque creo que no debemos pensar más allá del Zuazo", que es el equipo que este sábado visitará La Fuensanta.
La primera consigna del preparador del Adesal es centrarse en los siguientes 60 minutos de competición. A eso añade que "lo primero es ganar este partido para después mirar la clasificación, aunque también tres victorias podrían ser suficientes para conseguir la permanencia en la Liga Guerreras Iberdrola".
Respetando el potencial del Zuazo, Rafael Moreno insta a sus jugadoras a un detalle fundamental: "Tenemos que recordar por qué ganamos en Bilbao: allí mostramos mayor ilusión que el rival y el sábado tenemos que ganar en eso, porque el San José Obrero nos ganó en eso el sábado pasado". Moreno augura que "será un partido igualado, seguro, y ese factor puede ser determinante".
