El Betis Deportivo, rival del Córdoba CF, es un equipo que cumple las señas de identidad de un filial: gusto por tener el balón, buenos fundamentos ofensivos e individualidades con un nivel notable para la categoría. Sin embargo, esa hipotética endeblez de la que suelen adolecer los equipos asimilados se cumple poco, o directamente no aparece, en el caso del filial bético. Su técnico, Manel Ruano, ha logrado que sus chavales puedan adaptarse a las circunstancias de cada partido y aunque tengan preferencia por manejar el balón, no han sido pocos los encuentros o los momentos dentro de estos en los que han sabido mantenerse ordenados atrás, presionar en bloque medio o incluso en presión alta para robar y salir al contragolpe. 

Además, la presencia de un delantero con unas características muy determinadas permite al Betis Deportivo tirar del recurso del balón largo en caso de necesitarlo, aunque sea un aspecto que haya utilizado poco a lo largo de la Liga. En lo que a la faceta defensiva se refiere destacan su portero, Dani Rebollo, con el segundo mejor porcentaje de porterías a cero en el Grupo 4, y Luis Martínez, auténtico líder del equipo, un central de 27 años que se incorporó al equipo cuando este militaba en Tercera División procedente del Atlético Sanluqueño.

Generalmente, este Betis Deportivo suele manejar y jugar bien por dentro para finalizar por fuera, sea por medio de sus habilidosos extremos o por sus laterales, Julio Alonso y David Carmona, que tienen mucha profundidad.

Una muestra clara de cómo le está funcionando el propio sistema, más allá de nombres, a Manel Ruano es el caso de la ausencia de Bandaogo, que a sus 20 años fue fichado de la Balona como hombre clave para el centro del campo. El burkinés se lesionó, se le relevó por el juvenil Marchena y el Betis Deportivo no se resintió por la ausencia del africano.

En el aspecto atacante, el próximo rival del Córdoba CF sufrió la baja tras el mercado invernal de Yassine Fekir, que dejó fichas libres para nuevos jugadores del filial, al que llegaron Juan Serrano, del Algeciras, y que ha tenido algunas más oportunidades que el resto; Isra Cano, del Linares Deportivo, y Chema Núñez, procedente del Albacete. Tres nombres que hubieran sido apetecibles para cualquier equipo del Grupo 4 y que, sin embargo, apenas han tenido hueco en las titularidades del conjunto verdiblanco. 

Con sello de Primera

Un hombre que puede estar en El Arcángel es Rodri. El mediapunta, habitual ya con Pellegrini, desprende calidad en todas sus acciones, da el último pase, dispone de un buen regate en conducción y es un hombre desequilibrante, así como Fran Delgado y Calderón, extremos rápidos y con buena finalización. Generalmente, ambos aprovechan también la superioridad generada por los laterales y tiran de su propia velocidad y calidad para terminar jugada.

El nombre más destacado en este Betis Deportivo es el de Raúl García de Haro, máximo goleador de Segunda División B y que aprovecha todos sus recursos. Por su envergadura, aprovecha bien el juego aéreo, pero además rompe muy bien al espacio y dispone de una gran capacidad de definición dentro del área rival.

Por lo tanto, el Córdoba CF deberá tener como referencia el encuentro jugado en la primera vuelta en la Ciudad Deportiva Luis del Sol. En aquel encuentro, el filial bético demostró que en los mejores momentos de los blanquiverdes, en la primera parte, sabía mantener el orden defensivo para intentar salir a la contra, aspecto en el que los extremos y Raúl García tomaban protagonismo. Posteriormente, en la segunda mitad, los de Ruano supieron hacerse con el balón en no pocas fases y ahí aparecieron tanto los laterales -llegando hasta el fondo en varias ocasiones- como Raúl García de Haro, demostrando así este Betis Deportivo su capacidad camaleónica y de adaptación a lo que exige el partido en cada momento.