MIRANDÉS 3Bajan las aguas revueltas en Miranda de Ebro. El equipo rojillo es colista y desde que su nuevo entrenador (el cuarto esta temporada) Pablo Alfaro cogiera los mandos, ha perdido tres de de los últimos cuatro partidos.

Los burgaleses plantean el partido del domingo como una final, pero el primer contratiempo vino ayer, cuando las pruebas realizadas al central Ruymán Hernández diagnosticaron una fractura «en la falange distal del segundo dedo de su pie izquierdo», por lo que será una baja segura ante el Córdoba.

El Mirandés ha planteado todas las sesiones de entrenamiento entre semana a puerta abierta, buscando atraer a la afición, y solo el sábado se ejercitará a puerta cerrada.