Fue el partido en el que menos sufrió Del Bosque porque Francia apenas exigió a España, lo que aumentó la autoestima de los jugadores. Uno de ellos, Xavi, hablaba de la personalidad que demostró el equipo. "Estamos felices por el pase. Jugamos un partido muy serio con nuestra filosofía, que es innegociable. Ahora nos tienen más respeto lo rivales", declaró el jugador del Barcelona. De las misma opinión era su entrenador, que apuntó que el dominio de sus jugadores fue total, sobre todo en la primera mitad.

Esta vez Del Bosque no se quejó de que los jugadores no celebraron el pase a semifinales, tal como sucedió tras vencer al Croacia. La gran preocupación del seleccionador español era la de recuperar cuanto antes al equipo para encarar el encuentro del miércoles ante Portugal, que tendrá dos días más de descanso antes de encarar la semifinal ante el equipo español. "La verdad es que dos días menos se notan. Acabamos de hablar de eso", declaró el técnico salmantino.

En un primer análisis, Del Bosque apuntó que el equipo nunca pasó apuros. "Tuvimos una primera media hora muy buena y controlamos bien en todo momento. Iker apenas ha tenido trabajo", dijo el entrenador español. Una vez más se le volvió a preguntar por la presencia de Cesc como falso nueve, un tema recurrente desde que se inició la Eurocopa. Ayer, Del Bosque quiso zanjar el asunto. "Confío en él. Tenemos tres delanteros que son muy buenos, pero a Fábregas le veo bien para jugar. No tengo por qué dar más explicaciones", sentenció Del Bosque. Luego se refirió a los recelos que despierta la pareja Busquets-Xabi Alonso. "Sé que son una pareja contestada, pero son jugadores más de ataque que de defensa", manifestó Del Bosque.

Mientras, Rami, el central francés, resumía lo que había sido el encuentro. "Jugamos contra el mejor equipo del mundo. España ganará a Portugal porque son los mejores", dijo el jugador del Valencia.