La ineficacia goleadora no es un mal de circunstancias para el Córdoba CF, más bien se encuentra enquistado en un cuerpo blanquiverde que falla, precisamente, en el concepto principal del juego: marcar. Y es que sólo en dos de las cinco campañas desde el ascenso a Segunda División A la ofensiva cordobesista a estas alturas del campeonato respondía a la media de, al menos, un tanto por partido. En la campaña en curso, para no ser menos, el Córdoba CF no alcanza, tampoco, esa simetría.

"Mala fortuna", dirán los que no quieran ver la realidad más allá del análisis simple; desacierto en los movimientos de mercado para dar con un delantero que depare estadísticas goleadoras garantizadas puede ser un punto para el análisis más ajustado en torno a una sequía anotadora que dura ya cinco temporadas.

Sólo dos veces ha estado el Córdoba CF por encima de los 30 goles marcados en otras tantas jornadas en los cinco últimos ejercicios. En la temporada 2001/2002, la renta goleadora cordobesista en ese lapso era de 34 dianas; en la 1999/2000, la del presupuesto más corto de los blanquiverdes en la categoría de plata, también había alcanzado los 37, su cómputo más alto en esta curva de trayectoria. Sin embargo, el arranque de aquella Liga que suponía el reencuentro del cordobesismo con la Segunda División A tras tres lustros de alejamiento fue una premonición: el primer gol del nuevo Córdoba CF de plata tardó 384 minutos en llegar, cinco partidos.

En relación con la pasada campaña, referente de historia para no dormir, el Córdoba CF actual sólo ha marcado dos tantos más, los mismos puntos de más que el equipo de Miguel Angel Portugal ofrece en relación del que entonces ya dirigía Fernando Zambrano. En la temporada 2000/2001 la cuenta se estancó en 26 goles.

EL CUARTO PEOR El caso es que el Córdoba CF es en estos momentos el cuarto peor atacante del fútbol profesional español, entre Primera y Segunda División A. En la categoría de plata, sólo el Polideportivo El Ejido (25 goles) y el Tenerife (21) ofrecen peor hoja de recorrido que los blanquiverdes. El Algeciras, que por algo es colista, la iguala. En Primera División sólo el Murcia, también cerrando el furgón de cola, ha visto puerta menos veces que el Córdoba, 25.

No obstante, hay un apunte estadístico para el optimismo. Desde la temporada 1999/2000, el Córdoba CF nunca suma más de tres jornadas sin marcar. Si también es fiel a esta costumbre, en El Mirador debe regresar el goteo anotador ahora atrancado.