La escritora Eugenia Tusquets aborda el drama de los bebés robados en España en su última novela, Ladrones de vidas, basada en hechos reales. Tusquets ha explicado que el tema central de la novela es el de los bebés robados, «ese largo episodio tan desgarrador y degradante para este país».

La escritora se basa en un hecho real, «aunque ficcionando la situación social y profesional de los protagonistas para salvaguardar sus identidades». Algunos aspectos del caso concreto que relata entroncan con la última proposición de ley presentada el 25 de septiembre por las asociaciones de niños robados, con la que se pretende que «salga a la luz pública toda la documentación hasta el momento oculta, y garantizar así el derecho de todo ciudadano a conocer sus orígenes», subraya.

Ni las acciones legislativas ni la labor periodística alcanzan a establecer la verdadera dimensión humana de de estos casos, cuyos detalles se pierden en los tecnicismos o el sensacionalismo. Por esta razón, Tusquets considera que «es importante utilizar la novela para dar cuenta de cómo una acción despiadada, a veces tratada solo burocráticamente, puede destrozar varias vidas». La asociación Todos los Niños Robados son También mis Niños se ha involucrado en el proceso de investigación. Y en el prólogo, la presidenta de la asociación, Soledad Luque, indica que «lo más terrible es que después de 40 años de dictadura y de más de 40 años de democracia, la impunidad continúa».

En la novela, Benicio cuenta en primera persona sus vivencias como investigador de un caso de bebé robado al nacer en el Madrid de los años 70. Emma, la otra protagonista, narra, también en primera persona, sus experiencias desde adolescente rebelde a actriz de reparto en Los Ángeles. En el desarrollo narrativo, las vidas de ambos protagonistas se acabarán cruzando.