La Bienal Fotográfica de Córdoba, que este año alcanzaría su novena edición, puede quedar suspendida por falta de tiempo. A tres meses de su celebración, que tendría lugar en diciembre, aún no hay nada concertado por lo que, según José Gálvez, organizador del certamen, es casi imposible que este año Córdoba cuente con esta importante cita a nivel nacional.

La celebración de elecciones en el mes de mayo y el cambio del teniente de alcalde de cultura, cargo que ahora ostenta Luis Rodríguez, ha perjudicado notablemente el desarrollo de esta famosa Bienal dado que el nuevo concejal, según José Gálvez, necesita tiempo para prepararse. "Además, los presupuestos no son los adecuados", añadió. Ante el escaso tiempo del que disponen, la Asociación de Fotografía de Córdoba (Afoco) ha remitido un informe al Area de Cultura del Ayuntamiento en el que se propone la posposición del acto hasta el año próximo.

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"Desde que la Bienal surgió en el año 85, el Premio Mezquita se ha desarrollado simultáneamente al certamen en los años impares. Con esta propuesta lo que intentamos es que los años pares no queden desiertos, que no haya que esperar dos años para retomar la fotografía", apuntó a este diario el también tesorero de Afoco. Según Gálvez, el hecho de que ambos eventos coincidan se traduce en una competencia innecesaria, además, "se restan asistencia mutuamente", añadió.

Por su parte, Rafael López, presidente de Afoco, señaló que en el mes de junio mantuvo una conversación extraoficial con Luis Rodríguez donde le informó sobre la idea que perseguían.

Sin embargo, Luis Rodríguez no confirmó ayer la suspensión del evento. "Es el órgano competente el que tiene que decir. Mañana se reúne la comisión informativa de cultura donde se tratará éste y otros asuntos", apuntó ayer a este diario. No obstante, José Gálvez afirma que ya no se cuenta con el tiempo suficiente. "La Bienal necesita ocho meses de preparación, a estas alturas las exposiciones más importantes que pretendíamos traer estarán cogidas por otros eventos nacionales".

Otros de los motivos que han incentivado a la Asociación a proponer el aplazamiento de la Bienal es la gran importancia que ha ido adquiriendo edición tras edición. "La Bienal ha crecido tanto que es imposible desarrollar ambos eventos (la Bienal de Fotografía y el Premio Mezquita) a la vez. Por ello, para la próxima edición pretendemos ajustar el certamen a la población cordobesa, hacer menos exposiciones pero en las que prime la calidad". En la Bienal de Fotografía del 2001 se contó con 35 exposiciones que divulgaron las nuevas tendencias de la fotografía por toda la ciudad, mientras que en Madrid, ciudad con un índice de población muy por encima del de Córdoba, se hacen 70. "Se trató de una Bienal demasiado amplia, ni siquiera a mí me fue posible asistir a todas las salas", añadió José Gálvez.