El documental Operación Algeciras , de Jesús Mora, revela un plan secreto de Argentina para volar la base naval británica de Gibraltar, durante la guerra de las Malvinas en 1982, que fue abortado por la Policía española, aunque para los tres países estos hechos oficialmente nunca existieron.

Mora, que ha participado en la sección informativa de documentales del sexto Festival de Cine Español de Málaga, explicó ayer que el comando, formado por ex guerrilleros convertidos en miembros del servicio de inteligencia de la Marina argentina, tenía como objetivo atacar a los británicos en su retaguardia. Los ejecutores de esta acción recibieron las minas submarinas que iban a ser utilizadas "por valija diplomática a través de la Embajada argentina en Madrid", y el comando se instaló en distintas localidades de la Costa del Sol y de Cádiz como "Fuengirola, Estepona y Algeciras", añadió Mora. Finalmente, "el destino jugó la baza decisiva" en la desarticulación de este grupo por parte de la Policía española, y el documental "desmonta la especulación de que se hubiera producido gracias a la actuación de los servicios de inteligencia".

Desde aquel momento, los hechos se han mantenido en España como "un secreto de Estado y no se ha profundizado, sólo se conoció la parte final de la detención y no se investigó el origen", en Argentina "también se negó" y en el Reino Unido "se especuló con la posibilidad de que hubieran existido". En el caso de España, en esos momentos vivía "una delicada situación política, con la agonía del Gobierno de Calvo Sotelo tras la derrota en las elecciones autonómicas andaluzas de 1982.

Por ello, el Gobierno español intentó mantener en el conflicto de las Malvinas "un equilibrio, por esa entrada en la OTAN, donde era objeto de sospechas de los británicos, y por su relación con Argentina". Mora se decidió a filmar este documental después de conocer las escasas referencias de la operación publicadas por la prensa en estos veinte años, a partir de las que "deduje que había una historia impresionante", y dedicó un año y medio a la elaboración de la cinta.