Servicios sociales

Los temporeros inmigrantes de Lucena se alojan ya en una dependencia municipal

La caseta, junto al antiguo recinto ferial, consta de 16 plazas

Colchones en la calle donde dormían los temporeros de Lucena

Colchones en la calle donde dormían los temporeros de Lucena / Manuel González

Algunos de los temporeros disgregados, desde hace semanas, en varios puntos de Lucena y que dormían a la intemperie, pernoctan, desde el pasado viernes, en unas dependencias municipales adecuadas por el Ayuntamiento. La articulación de la figura administrativa del recurso de emergencia ha posibilitado superar las trabas burocráticas que, en los últimos días, ralentizó sistemáticamente su apertura.

Finalmente, el Consistorio ha habilitado dos instalaciones usadas como casetas por Policía Local y Protección Civil, junto a la entrada del antiguo recinto ferial y, en cuyo exterior, se contemplaban colchones, mantas y otros objetos básicos de los propios temporeros. En cada una de estas estancias, el área de Servicios Sociales colocó cuatro literas. Por consiguiente, el número de plazas disponibles para acoger a los temporeros asciende a 16

La edil de Servicios Sociales, Irene Aguilera, ha mostrado su satisfacción al conseguir proporcionar este servicio transitorio, después de unas gestiones que «han sido difíciles» al requerir de «un trabajo muy duro», y «a marchas forzadas», por parte de «todo el equipo» de su departamento.

En la primera jornada de apertura excepcional de este alojamiento provisional, acudieron, a resguardarse de la implacable noche, ocho transeúntes. Varios de estos jornaleros, en su mayoría ciudadanos marroquíes, prefirieron trasladarse a otras localidades y, también, otros rechazaron esta solución facilitada por la administración local. 

Medida provisional

Diferentes colectivos locales, que celebraron sucesivas reuniones con responsables municipales en los últimos días, con la finalidad de hallar una alternativa para quienes permanecían a la intemperie, respaldan al Consistorio en esta iniciativa. No obstante, el coste y la gestión los asume directamente el Ayuntamiento. Un vigilante de seguridad cubre el tramo nocturno y, asimismo, actúa un servicio de limpieza. 

Por el momento, este recurso, por su carácter de emergencia, únicamente persistirá durante el invierno, mientras continúen las rigurosas condiciones de frío y lluvia. «Luego cerraremos el recurso», reconoció Irene Aguilera, porque la normativa vigente únicamente habilita su actividad en un período concreto y asociado a intervalos de necesidad perentoria. De hecho, «esta ha sido la clave», concretó la edil de Servicios Sociales dado que «al no ser estable, ni a largo plazo, se rebaja la presión y hemos encontrado esta manera más fácil y que menos problemas pudiera dar».

Técnicos de Servicios Sociales abordarán el control y el seguimiento de los temporeros cuyas condiciones les permiten acceder a ambas casetas, en un edificio donde Cruz Roja goza de otro espacio cedido por el Ayuntamiento. 

Estos profesionales, en «contacto directo» con los trabajadores sociales y los colectivos que asisten al Centro de Atención Básica, transmitirán, a los potenciales beneficiarios, la posibilidad de asistir al alojamiento actualmente operativo junto al antiguo recinto ferial.

Al respecto del Centro de Atención Básica, situado en los bajos de la Plaza de Toros, Irene Aguilera confirmó que su horario de apertura ya abarca, por la tarde, de lunes a viernes, aparte de los tramos matinales, en sendos días, tal y como habían demandado las personas, carentes de servicios esenciales, y que acuden a este local a ducharse; lavar sus pertenencias; desayunar o merendar; y compartir convivencia y calor humano. La asociación Amigos de la Escuela, diariamente, se implica decisivamente en el funcionamiento de esta asistencia.

En cambio, por el momento, el Ayuntamiento lucentino descarta extender su utilidad para los fines de semanas.