ERA PROPIEDAD DE LAS HERMANITAS DE LOS ANCIANOS DESAMPARADOS

El Ayuntamiento de Baena firma la compra del edificio de la residencia de San Francisco

El importe total de la operación ronda los 460.000 euros

Asistentes a la firma de la compra de la residencia de San Francisco de Baena.

Asistentes a la firma de la compra de la residencia de San Francisco de Baena. / CÓRDOBA

La alcaldesa de Baena, María Jesús Serrano, ha firmado este viernes ante notario la compra de la residencia de San Francisco a la Congregación de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados.  “Hoy es uno de los días en los que vemos cómo la política sirve para resolver los problemas de los vecinos porque no podíamos permanecer ajenos y había que dar una solución al edificio, al barrio, a la iglesia y las cofradías, porque San Francisco es algo más que un edificio”, señala la alcaldesa.

Serrano ha explicado que el Ayuntamiento ha tomado esta decisión por la realidad de la residencia. “No hay ninguna posibilidad de que las hermanitas puedan seguir estando en Baena”, actualmente hay solos tres y por normativa canónica tiene que haber seis, “algo que se explica en la falta de vocaciones”, a lo que se suma que no cumple la residencia la normativa sociosanitaria, porque es un edificio del siglo pasado, y la Junta de Andalucía ha confirmado que no concertaría más plazas.

 Ahora el Ayuntamiento trabajará para que se instale en el edificio una actividad del tercer sector, relacionadas con el cuidado de niños, trastorno del espectro autista, enfermos de patología dual, personas sin hogar.  “Vamos a trabajar para que más pronto que tarde haya una actividad y vamos a buscar todo tipo de fondos, de subvenciones, de ayuda para poder rehabilitar el edificio, con lo cual además de solucionar el problema que significa dejar ese edificio vacío y sin actividad, generemos empleo”.

La alcaldesa ha enviado un mensaje a los trabajadores “que más pronto que tarde su contrato de trabajo se verá terminado, vamos a estar al lado de ellos para que la nueva empresa cuente con ellos”. Agradece a las hermanitas su labor “callada y silenciosa” durante más de un siglo en Baena, atendiendo a las personas más necesitadas y también al patrimonio baenense que es la iglesia de San Francisco. Por último, dejó claro que la compra no significa que las hermanitas se vayan de momento, “se podrán quedar hasta que ellas quieran”.

Fase larga y tortuosa

 David Bazuelo, concejal de Centro Histórico, añade que por fin se ha acabado “una fase que ha sido larga y tortuosa, de manera que creo que es positiva para el Ayuntamiento, la congregación y especialmente para la sociedad baenense”, ahora “nos toca, como equipo de gobierno, empezar una nueva fase como es la búsqueda de financiación, la rehabilitación de edificio y conseguir que los antes posible haya otra actividad que genere”. 

El Ayuntamiento adquiere de pleno dominio a la Congregación de Hermanitas de los Ancianos Desamparados la residencia de ancianos desamparados situada en la calle San Francisco 9.  El precio acordado es de 409.914,36 euros y se hará mediante pago fraccionado y aplazado de forma que a la firma de la escritura se abonarán 81.982,87 euros y el resto en cuatro anualidades por el mismo importe. Este bien se inscribirá en el Inventario Municipal y en el Registro de la Propiedad. A lo que hay que sumar 58.017 euros de los Planes Provinciales para la compra de la zona de las huertas.

 Desde el punto de vista urbanístico, la edificación tiene la consideración de equipamiento de Servicio de Interés Público y Social y además se encuentra catalogado con protección integral de acuerdo con el Catálogo de Bienes protegidos del PGOU de Baena junto a la iglesia de San Francisco de la que forma parte indivisible al tratarse de un conjunto arquitectónico unitario.

Actividad unida al barrio desde el año 1900

Esta compra da solución a un problema que lleva años preocupando a la sociedad ya que esta residencia está unida a la vida del barrio desde el año 1900 cuando las monjas se instalaron en Baena.

Fue en el año 2017 cuando por primera vez comunicaban su intención de abandonar el asilo, aunque en 2018 el gobierno local llegó a un acuerdo para que las monjas continuaran con su labor y no fue hasta mayo de 2021 cuando se confirmaba el cierre. La solución era la compra del edificio por parte del Ayuntamiento para seguir dando vida a esa parte del barrio, lo que llevaba al PSOE, en ese momento en la oposición, a proponer una partida en el presupuesto de 2022 para iniciar la compra. Sin embargo no ha sido hasta esta nueva corporación, con el equipo de gobierno de PSOE e IU, cuando se celebraba un pleno extraordinario y urgente a principio de julio en el que se aprobó la modificación presupuestaria para poder realizar la compra de la residencia y dar una solución a esta situación.

 Con esta firma la alcaldesa cumple con lo que dijo en su toma de posesión, que era materializar esta compra y poner fin a un problema que llevaba años sin resolverse.