La Feria Real de Baena ha recuperado su formato original con el tradicional encendido del alumbrado. Un total de 17 arcos iluminan el recinto desde la portada, que este año es más pequeña para reducir el consumo de energía.
Tras el encendido del alumbrado, pistoletazo de salida de esta feria que llegará hasta el domingo, se celebró en la caseta municipal el Salmorejo Flamenco, que llegó a su 45 edición, con la actuación al cante de Jesús Méndez, Encarna Anillo, Manuel Castulo, Antonio Nieto y Lourdes Palmero; a la guitarra Pepe del Morao, Andrés de Pituquete, Antonio Carrión y Chaparro Hijo; y al baile Araceli Muñoz y su cuadro flamenco, presentados por Rafael Serrano.
La alcaldesa de Baena, Cristina Piernagorda, tras el encendido de la feria, destacó que desde el Ayuntamiento se ha hecho un gran esfuerzo de todo tipo, económico y de infraestructura. Aclaró que se han hecho algunos cambios en la feria «debido a las obras de la calle Salvador Muñoz, pero es muy parecida a lo que se venía haciendo otros años». En las últimas semanas se ha actuado en la caseta municipal para que esté en funcionamiento estos días y afirmó que «esta es la mejor feria que se le puede ofrecer al pueblo de Baena».
Sobre el futuro recinto, explicó que se ha hablado con los grupos políticos pero que es un modelo que requiere una gran capacidad inversora y no es fácil de acometer, pero que está en la mente del equipo de gobierno. José Gómez, concejal de Festejos señaló que esta es la primera feria que se celebra con normalidad tras la pandemia y «se ha intentado hacer un programa lo más completo posible para que todas las personas tengan un punto de encuentro en la caseta municipal».
