Gastronomía

Abre El despacho del Tollín, un nuevo concepto de montaditos

El nuevo establecimiento se ubica en la calle Jesús y María de Córdoba

El despacho del Tollín, un nuevo concepto de montaditos.

El despacho del Tollín, un nuevo concepto de montaditos. / CÓRDOBA

Diario CÓRDOBA

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Miguel Eguidazu y Luisitania Blanco se embarcan en una nueva aventura que abrió sus puertas hace unos días en la calle Jesús y María de la capital cordobesa. Se llama El despacho del Tollín y es un concepto fresco, tipo street food pero "de calidad". El chef cordobés, que bebe de sus raíces vascas y es ya propietario de dos establecimientos señeros de la calle Málaga (Tollín y Carrasquín), traslada ahora lo mejor de sus montaditos y de su famoso vermú a este despacho pensado para el consumo a pie de calle. "Queríamos montar un sitio con otro concepto, algo más moderno, pero aprovechando nuestro producto: unos montaditos de mucha calidad que ya están perfeccionados al máximo", explica Eguidazu.

Logo de 'El despacho del Tollín'.

Logo de 'El despacho del Tollín'. / CÓRDOBA

El bagaje ya lo traen hecho. La mayoría de las recetas, como el Capitán (bacalao marinado en casa, torreznos crujientes y aove), son ya clásicos de su carta, y ahora suman a la oferta algunos nuevos como el Diablo (estofado de callos, con sobrasada y una salsa medio picante) o el Puchero (con pringá del cocido) y los sandwiches como el de pollo, maíz, curry y nueces o el de atún, anchoa y piquillo. "Esto ha nacido con manual de procedimientos", afirma su propietario que tiene muy testado su producto. "El mismo pan de los montaditos es una receta propia, que nos hacen para nosotros y que viene a media cocción, de modo que el pan se termina de hacer aquí en el tostador para que el cliente se lo coma recién hecho".  

Carteles con neones de colores, una pantalla gigante y un logo con un toque manga que ensalza los productos frescos, todo para llamar la atención de quienes van de paso y tienen prisa. Miguel y Lusitania han trabajado mucho y recorrido medio mundo para buscar la inspiración de este local. "Aspiramos a atraer a nuestra clientela que ya lleva 12 años con nosotros y al turista que busca un producto de comida rápida, pero de calidad y económico", dice Miguel que también lanzará su carta en la plataforma Glovo.

El despacho de Tollín se suma a la oferta de una calle que aspira a recuperar el protagonismo de pasadas décadas y que busca convertirse en eje tranversal del centro histórico y el centro comercial de Córdoba. "Es una zona que está cambiando mucho y que conocemos muy bien, y teníamos esta localización que es muy buena para montar un negocio de este tipo", comenta el cocinero.

Además de la carta salada, los clientes podrán concluir su almuerzo o merendar con sus postres (incluida la versión del pan con chocolate de nuestra infancia y otra del pastel cordobés, además de la tarta de queso del Tollin horneada por ellos mismos) y un café de calidad que bien vale pararse y seguir disfrutando de Córdoba.