Las comunidades energéticas de Córdoba firman un acuerdo con Repsol

Aunque la Gerencia Municipal de Urbanismo busca una solución para la instalación de placas solares en el casco histórico de Córdoba, seguirá impulsando y recomendando la constitución de comunidades energéticas, como las tres que actualmente se están desarrollando en Córdoba y que están impulsadas por la Federación de Asociaciones de Vecinas Al Zahara, y la Federación Andaluza de Cooperativas de Trabajo Asociado (Faecta). Estas comunidades energéticas de la ciudad esperan poder estar funcionando este verano.

Qué son las comunidades energéticas

Las comunidades energéticas permiten al ciudadano ser productor de la energía que consume, sin necesidad de instalar placas fotovoltaicas en su domicilio. Estas miniplantas que convierten la energía lumínica en energía eléctrica conectan con la red de Endesa para llevar la luz a las casas de sus socios.

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Las que se van a instalar a las afueras de Córdoba supondrán una inversión aproximada de 800.000 euros, tienen un radio de acción de entre 25 y 50 kilómetros y pueden solucionar, de paso, el problema que tienen muchos cordobeses que viven en el casco histórico para instalar placas solares. 

Precisamente, el Ayuntamiento de Córdoba anunció hace unas semanas la intención de ceder suelos municipales a los promotores de esta iniciativa (que ya han visitado una de las zonas propuestas por el Consistorio junto al cementerio de la Fuensanta) e incluso sumarse como socio a una de ellas.

Cierre de un acuerdo

Además, estas comunidades energéticas han cerrado ya un acuerdo con Repsol, que «con independencia de cuando empiecen a funcionar las plantas fotovoltaicas, se compromete a dar el servicio en las condiciones que se pacten a partir del mes siguiente de la constitución oficial de las cooperativas», informa Víctor Montoro, uno de los promotores de las comunidades energéticas.

Proceso de socialización

En este sentido, está previsto que en el mes de abril se inicie lo que ellos llaman «proceso de socialización», es decir, el proceso para que quienes quieran sumarse al proyecto se inscriban en él. A partir de que se cierre el número de familias que deben componer cada una de las tres cooperativas (se ha estimado que sean 800 familias por cooperativa), ya podrán empezar a disfrutar de las nuevas tarifas de consumo eléctrico y contará el año en curso para empezar a beneficiarse de la bonificación del 50% del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que podrán aplicarse durante diez años.  

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