La UCO estudia el impacto de la guerra en la educación de los niños ucranianos

Realizar un diagnóstico sobre el impacto que ha tenido la Guerra de Ucrania, que pronto cumplirá dos años de conflicto, en la educación y el aprendizaje de los menores, tanto los que permanecen en el país como los que huyeron con sus familias y viven refugiados en países de acogida. Ese es el principal objetivo de la Jornada de Solidaridad con la Educación Ucraniana que se está desarrollando este martes en la facultad de ciencias de la Educación y Psicología de la Universidad de Córdoba.

El responsable del grupo de investigación de Educación, Diversidad y Sociedad y coordinador de las jornadas, José Luis Álvarez, ha explicado que la jornada tiene además un objetivo de sensibilización y de investigación sobre qué políticas educativas se vienen implementando en Ucrania y en los países de acogida para paliar los efectos del conflicto bélico en el deterioro del aprendizaje.

La Educación Infantil ha perdido dos tercios del alumnado

En este sentido, ha señalado que en el último año, se han empezado a hacer visibles algunos signos de ese deterioro del sistema educativo ucraniano que se han visibilizado en los medios y que reflejan, por ejemplo, cómo ya solo un tercio de los niños menores de 6 años asisten a las aulas de Educación Infantil mientras que antes de la guerra acudían el 100% de los menores. También ha señalado que el profesorado ucraniano ya manifestado "el deterioro que vienen detectando en determinadas áreas curriculares como la lengua, la lengua extranjera o las matemáticas" como efecto de la guerra.

En cuanto a Córdoba como ciudad de acogida, Álvarez ha comentado que aún hay en torno a un centenar de menores ucranianos escolarizados en la provincia, si bien la cifra está muy lejos de la de otros lugares de Andalucía como Málaga donde hay más de mil. Según fuentes de la Delegación provincial de Educación, el curso pasado había escolarizados en Córdoba 156 menores refugiados ucranianos, una cifra que este año ha aumentado a 191, algo que podría deberse a que algunos eran demasiado pequeños cuando llegaron para incorporarse a la educación obligatoria.

El acto de inauguración ha contado con la presencia del rector de la Universidad de Córdoba, Manuel Torralbo, y del ministro consejero de la Embajada de Ucrania en España, Dymitro Matiuschenko, que ha confirmado el impacto que la guerra está teniendo en la educación de la población infantil. "Estamos viendo cómo los menores tienen que acudir a refugios cada día para asistir a clase y cómo hay escuelas ubicadas en los metros porque son los lugares más seguros para ellos". Matiuschenko, que ha agradecido el sistema de acogida puesto en marcha por el Gobierno de España, "al haber facilitado la adaptación de los niños al nuevo sistema de vida y al aprendizaje del castellano, combinando el sistema educativo español y el ucraniano", ha insistido en que es muy importante poner en los efectos que está dejando el conflicto bélico en los menores.

"Necesitan tablets y autobuses para los traslados"

"Necesitamos mantener la atención sobre los niños ucranianos aquí y sobre todo, recordar a los menores que están en Ucrania y que necesitan tablets, porque debido a la destrucción de las escuelas se ven obligados a dar clases on line, o autobuses para realizar los traslados de las regiones donde no hay colegios porque han sido arrasados a aquellas donde sí están funcionando".

También ha informado de que la Embajada está trabajando con los ayuntamientos para organizar periodos de estancia de corta duración de los menores que siguen en Ucrania para que "puedan pasar unos meses en España lejos de las sirenas y los bombardeos".

En cuanto a los que están asistiendo a clase en España, ha señalado que los principales problemas de aprendizaje que se están encontrando se deben a "las secuelas psicológicas causadas por los bombardeos y violaciones de las que ellos han sido testigo, así como los causados por la necesidad de cambiar de un sistema educativo y un idioma a otro".