PATRIMONIO

La macsura de la Mezquita-Catedral de Córdoba, "la gran obra" que llega

Gabriel Rebollo afirma que la labor será «de estricta restauración, porque es tan bellísima, que para cualquier intervención habría que ser muy prudente»

A finales de año comenzará el trabajo en este espacio, donde no se actúa desde hace un siglo

Macsura de la Mezquita Catedral de Córdoba.

Macsura de la Mezquita Catedral de Córdoba. / MANUEL MURILLO

Pilar Cobos

Pilar Cobos

La restauración integral de la macsura de la Mezquita-Catedral de Córdoba se plantea como «la gran obra» que se desarrollará en el monumento en los próximos tres años, en palabras del arquitecto conservador Gabriel Rebollo. El proyecto, que fue presentado por el Cabildo el mes de mayo pasado, tiene un presupuesto de 3,7 millones de euros. La documentación y los permisos ya están listos, de forma que se espera comenzar el trabajo a finales de este año o principios de 2024. 

Esta construcción, impulsada en el año 960 por el califa Al-Hakem II como lugar para su rezo, fue intervenida por última vez a principios del siglo pasado. Gabriel Rebollo recuerda que Ricardo Velázquez Bosco, probablemente en torno a 1910, realizó una actuación.

Sin embargo, la restauración más importante se hizo en 1815. Cuando los franceses salieron de España, un obispo ilustrado, Pedro Antonio Trevilla, decide restaurar la macsura. «Lo hace el Cabildo. Creo que es falso ese mito de que el Cabildo nunca ha querido restaurar las partes musulmanas y sí las cristianas», afirma el arquitecto conservador. La obra fue ejecutada por el arquitecto Baltasar Dreveton y por Patricio Furriel, organista de la catedral y mosaiquista aficionado.

«Es una intervención rarísima. De las primerísimas restauraciones, en el sentido moderno de la palabra, que se hacen en Europa. Porque sobre los edificios viejos siempre se ha intervenido, pero cuando tratan de recuperar el pasado, esas restauraciones son muy recientes. Cuando en la Mezquita Catedral se interviene en época del Renacimiento, hacen obras renacentistas», explica a modo de ejemplo.

De este modo, Gabriel Rebollo destaca su admiración por el trabajo realizado a comienzos del siglo XIX, rememorando que «Córdoba era una ciudad de provincia, poco avanzada, probablemente, empobrecida, con una burguesía agrícola, que no suele ser muy progresista. Y en esa ciudad surge algo casi nuevo en Europa»

Gabriel Rebollo explica este jueves la restauración de los brazos norte y sur del crucero de la Catedral.

Gabriel Rebollo explica este jueves la restauración de los brazos norte y sur del crucero de la Catedral. / PATRICIA CACHINERO

Cubierta y mosaicos

La restauración integral de la macsura proyectada ahora comenzará por la cubierta. «Nosotros empezamos las obras por el tejado», señala el arquitecto entre risas. El objetivo es asegurar que no habrá nuevos deterioros cuando se inicie la intervención en la parte baja.

Gabriel Rebollo detalla que la obra será «de estricta restauración, porque es tan bellísima, que para cualquier intervención habría que ser muy prudente y, en segundo lugar, porque la macsura no está arruinada», a pesar de que necesita una intervención urgente. Los mosaicos están muy estropeados, tienen entradas de humedad, y la cubierta se encuentra deteriorada. Este estado «nos habla de la bondad de esa construcción, que tiene 11 siglos y está muy bien», remarca. 

El trabajo se ha dividido en tercios, de modo que los visitantes del templo nunca encontrarán el espacio (que es uno de los más admirados del monumento) completamente cerrado. De hecho, la previsión es instalar toldos que podrían tener transparencias para permitir algo de visión al público.

A esta labor se sumará el estudio arqueológico, que se realiza en todas las obras arquitectónicas que se llevan a cabo en la Mezquita Catedral. Gabriel Rebollo se muestra convencido de que los estudios arqueológicos en la macsura «van a sacar muchos datos fundamentales». 

Como viene siendo habitual en el marco de los trabajos para su conservación, además de la obra de la macsura, la Mezquita-Catedral continuará registrando otras intervenciones de menor entidad. Precisamente, este jueves el Cabildo presentó la finalización de la restauración de las cubiertas de los brazos norte y sur del crucero, una actuación que ha durado 21 meses y ha tenido un presupuesto de en torno a 300.000 euros.

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