ayuntamiento de córdoba

Los mercadillos podrán vender alimentos de todo tipo y cambiar de horario por el mal tiempo

La comisión de comercio ambulante aprueba la nueva ordenanza, que todavía deberá pasar por pleno

En el texto se incluye también a puestos de caracoles y de castañas o las barracas de venta de chuches en Semana Santa

Noelia Santos

Noelia Santos

La comisión de comercio ambulante ha aprobado este jueves la nueva ordenanza reguladora del comercio ambulante. Como ha informado el delegado de Comercio y Mercados del Ayuntamiento de Córdoba, Julián Urbano, el texto podría estar aprobado de forma definitiva en torno a dos meses, teniendo en cuenta que ahora tiene que pasar por junta de gobierno local, luego elevarse al pleno y después sacarlo a información pública. Una vez publicado en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), si no hay alegaciones y pasados 15 días, la nueva ordenanza entraría en vigor.

Entre las grandes novedades que trae la nueva ordenanza con respecto a la anterior es la posibilidad de que los comerciantes ambulantes puedan vender alimentos, más allá de frutas, verduras, frutos secos o bebidas, que es lo que podían hacer hasta ahora. Urbano ha detallado que para que pueda ser así se deberá contar con distintos elementos como el carné de manipulador de alimentos o la refrigeración necesaria para aquellos productos que así lo requieran.

Se introducen también cambios en cuando a las modificaciones de titularidad de los puestos. En este punto destaca la posibilidad de transmisión mortis causa, que hasta ahora no existía, es decir, que si el dueño de un puesto fallece se puede transmitir la autorización del puesto, antes solo se podría hacer inter vivos. Sobre esto último, cuando hay un cambio de titularidad inter vivos ésta no será efectiva hasta que lo decrete la delegación. La razón de este cambio es que hasta ahora existían bastantes problemas al no presentarse la documentación.

También es novedad la inclusión de la posibilidad de alterar los horarios de los mercadillos por condiciones climatológicas. La ordenanza no establece los horarios que se cambiarán si llueve o hace mucho calor, por ejemplo, pero las asociaciones de comerciantes tendrán la posibilidad de solicitar cambios atendiendo a posibles condiciones climatológicas adversas.

La ordenanza "de la tranquilidad"

Según ha considerado Julián Urbano, esta nueva ordenanza es la "de la tranquilidad" y la que "recoge los anhelos" trasladados por el colectivo de comerciantes ambulantes. Cabe recordar que la antigua norma data de 2012, pero se había quedado fuera de los textos normativos que la Junta de Andalucía sacó adelante en 2013 con su Ley de Comercio Interior. Por ejemplo, en la ordenanza municipal los puestos fijos de mercadillo tenían una vigencia de cuatro años y la ley andaluza decía que tenían que ser 15 y prorrogables otros 15.

La ordenanza municipal nueva, ha indicado Urbano, mejora aún más el texto andaluz porque ya incluye en la norma al comercio callejero como puestos de caracoles, de castañas o las barracas de ventas de chuches en Semana Santa o el fútbol, que se regulan a través de un cuerpo normativo propio y que no están incluidos en la normativa autonómica.

Facua y Comacor se salen de la comisión

Facua ha informado de que ha abandonado la comisión municipal de comercio ambulante de la ciudad tras su constitución para "denunciar que se haya ratificado en el cargo al mismo secretario que en el anterior mandato ha obstaculizado la participación social entre las organizaciones que integran este órgano". Además, también se ha producido la salida de Comacor.

La asociación ha expresado su malestar y ha denunciado que en el anterior mandato el secretario ahora ratificado en esta comisión municipal "ha ninguneado y vapuleado los derechos de las organizaciones". Por ello, tras tomar posesión en este órgano, Facua ha traslado al nuevo presidente, el concejal Julián Urbano, que no participará en ninguna sesión que se convoque que siga asistida por el mismo secretario.

En otro orden, la asociación se ha reservado informar del nombre de dicha persona, al tratarse de un funcionario público. Si bien denuncia públicamente "las actuaciones que este responsable ha venido llevando a cabo, como por ejemplo negarse a hacerles entrega de las actas de las distintas reuniones celebradas en la comisión durante la legislatura anterior".