PRESENTACIÓN DEL PROYECTO

El centro de recepción de visitantes de la Mezquita-Catedral estará en funcionamiento en 2025

El Cabildo avanza el contenido museográfico del edificio, que abarcará toda la historia del monumento “sin restar importancia a ninguna de sus etapas”

El deán de la Catedral, Joaquín Alberto Nieva, con los arquitectos, en la presentación del proyecto.

El deán de la Catedral, Joaquín Alberto Nieva, con los arquitectos, en la presentación del proyecto. / NATALIA ROMÁN

Araceli R. Arjona

Araceli R. Arjona

Un año y medio tardará en ver la luz el futuro centro de recepción de visitantes de la Mezquita-Catedral de Córdoba esbozado por los arquitectos encargados del proyecto, que esta semana han firmado el contrato con los responsables del Cabildo Catedral y que se espera que vea la luz a principios de 2025. La entrada a este espacio será gratuita y complementaria a la visita del monumento

El portavoz del Cabildo, José Juan Giménez Güeto, y el deán de la Catedral, Joaquín Alberto Nieva, han dado a conocer el proyecto que se va a llevar a cabo en el Palacio Episcopal para transformar parte de este edificio en un espacio que sirva para dar la bienvenida a los visitantes del principal monumento de Córdoba y para facilitar la comprensión de un espacio complejo que alberga varios siglos de historia. Giménez-Güeto ha destacado el interés del Cabildo por dar a conocer “con total transparencia” el proceso que se ha realizado desde 2015 hasta ahora en este espacio y el objeto que se pretende con su rehabilitación. Así, ha presentado al arquitecto Juan Pablo Rodríguez Frade, del estudio Frade, elegido tras un concurso cerrado entre los mejores estudios de arquitectura especialistas en intervenciones museográficas y a la empresa Empty, que será la que se encargue de la producción museográfica ideada por Frade.

El deán de la Catedral, Joaquín Alberto Nieva, a la derecha, junto a los arquitectos del proyecto, en el espacio que se destinará a centro de recepción de visitantes.

El deán de la Catedral, Joaquín Alberto Nieva, a la derecha, junto a los arquitectos del proyecto, en el espacio que se destinará a centro de recepción de visitantes. / NATALIA ROMÁN

Una explicación fiel a la historia del edificio

De momento, y a falta de un presupuesto cerrado, el Cabildo ha adelantado que llenar de contenido el centro de recepción de visitantes tendrá un coste de más de 2 millones de euros, aunque la cifra final dependerá del tipo de audiovisuales y material específico que se emplee a la hora de contar al público la historia del monumento. En relación con el contenido y las especulaciones sobre la posibilidad de que la Iglesia intente restar protagonismo al pasado musulmán del monumento, el portavoz del Cabildo ha recalcado que “es nunca ha sido la intención” y que “se explicará la historia de la Mequita-Catedral en todos sus aspectos, tanto arquitectónicos como artísticos y de experiencias que ha vivido este lugar a lo largo de los años, sin restar importancia a la singularidad de este edificio, que es un conglomerado de capas y que sigue siendo hoy en día un edificio vivo”.

El dean ha recordado que el espacio elegido es un lugar singular y especial, ya que fue el que albergó en su día el Alcázar califal, al que se ha sometido a una importante restauración en los últimos años, ya que se encontraba muy deteriorado.. “Desde este Alcázar Califal, había un puente a través del cual el califa acudía a la Mezquita”, ha explicado, señalando además elementos de la misma época como el elefante que se encuentra en la fuente central del patio anexo.

Un discurso con dos espacios expositivos

Durante los próximos 18 meses, el equipo de Frade trabajará en la conceptualización del discurso expositivo y en los elementos narrativos que se emplearán para trasladarlo a los visitantes. Según el boceto inicial, el espacio al que se accede desde la entrada de la calle Torrijos que comunica con la cafetería será el primer contacto con el público, donde se habilitarán taquillas y un punto de información. Según Rodríguez Frade, “usaremos todos los estudios científicos para ofrecer una lectura completa del edificio y para que quienes vengan disfruten más de la experiencia, tanto si acuden antes como después de recorrer la Mezquita-Catedral para resolver las dudas que se les planteen, ya que estamos ante un monumento complejo que suscita muchos interrogantes”. El traslado de las taquillas pretende eliminar elementos que enturbian la vista en el Patio de los Naranjos, si bien el Cabildo ha concretado que “tal y como solicitó la Consejería de Cultura y pese a que el 60% de las entradas ya se adquieren vía online, siempre habrá un punto de venta en el Patio de los Naranjos”.

El centro de recepción de visitantes contará con dos instalaciones museográficas, una primera donde se explicará la historia del monumento desde el punto de vista arquitectónico, histórico, elementos decorativos y demás, con recursos museográficos tradicionales y otros de alta tecnología adaptados a todo tipo de usuarios y una segunda sala que se destinará a exponer las. Intervención de conservación y rehabilitación que se han llevado a cabo en el conjunto desde el siglo XIX y que se irá actualizando para dar a conocer las nuevas actuaciones que se lleven a cabo. “Será un espacio vivo donde podremos ofrecer intervenciones temporales, presentar nuevas adquisiciones...” También está previsto que haya actividades didácticas para niños en esta zona.

Un mirador con vistas desconocidas

Además de las exposiciones, se podrá visitar el mirador que hay en la planta superior y que ofrece unas vistas desconocidas hasta ahora de todo el entorno de la Mezquita-Catedral. También se instalará una tienda con recuerdos y una zona de aseos para los turistas en la planta baja.

El plazo de ejecución del proyecto museográfico dependerá en gran medida de la agilidad a la hora de conceder los permisos necesarios para el traslado de piezas y adecuación de espacios, algo que según Giménez Güeto, siempre condiciona cualquier obra de esta envergadura porque “el Cabildo no mueve nada si no tiene la autorización correspondiente”. En todo caso, ha asegurado que “la disposición de la Consejería de Cultura es la de colaborar y agilizar en la medida de lo posible la ejecución”. También han insistido desde el Cabildo en los beneficios indirectos que ofrecerá este nuevo centro de recepción, al aumentar el contenido visitable, alargando así potencialmente el tiempo de estancia en la ciudad.