Hasta el próximo febrero
Córdoba despide a Don Carnal con la esperada cabalgata y el dios Momo en llamas
Las calles se han llenado de cordobeses y visitantes en la última jornada de la fiesta carnavalera, en la que no ha faltado la música y el baile
![Las calles de Córdoba se llenan de máscaras](https://estaticos-cdn.prensaiberica.es/clip/263647b8-7b69-4c80-9e3a-6e8243f1e049_media-libre-aspect-ratio_default_0.jpg)
Las calles de Córdoba se visten de máscaras / CHENCHO MARTÍNEZ
Miles de cordobeses han llenado las calles de Córdoba, desde el paseo de la Victoria hasta la plaza de la Corredera, en una más que ansiada cabalgata de carnaval que ha regresado después de dos años de parón “con muchas ganas” y más de 40 agrupaciones, carrozas y batucadas. Después del gran desfile, precedido por bailes y ambiente, el dios Momo ha ardido en el centro de la plaza, despidiendo a Don Carnal de la ciudad hasta el próximo febrero.
Desde que los grupos iniciaron el recorrido, encabezados por los Danzarines Emeritenses, que han hecho parada en Córdoba por quinto año consecutivo, las calles han estado repletas y con mucho ánimo. La mayoría de personas, con una sonrisa en la cara, no han parado de mover el esqueleto.
Los extremeños subrayan el orgullo que supone para ellos abrir el espectáculo: “Cuando nos lo dijeron nos pusimos más contentos todavía”, ha comentado Antonio Trejo, director y fundador de esta asociación cultural.
Las Tendillas, también abarrotadas, han recibido con alegría las coplas, bailes y ritmos de la batucada. Asistentes a la cabalgata como David Ochoa señalan que “este año había mucha más gente” y que “se han visto disfraces más originales”. Según avanzaba el hilo de agrupaciones, las distintas comparsas y chirigotas iban entonando sus letrillas. Los espectadores más fieles a la fiesta iban ya cantándolas.
A la llegada a La Corredera la fiesta ha seguido con música, actuaciones de varios grupos y, ya a medi día, cuando el sol ha salido, con comida y bebida en mano. Los bares también han sido protagonistas en esta jornada, pues, aunque los veladores han desaparecido de la plaza para abrir paso al gentío, han podido instalar barras en la entrada de los establecimientos y vender comida y bebida. La barra de la carpa también ha continuado ofreciendo algo que echarse a la boca.
Superhéroes, dinosaurios, vikingos, vaqueros y diferentes tribus africanas han sido algunos de los disfraces elegidos este año por los cordobeses. También se ha vuelto a ver a Mario y Luigi, personajes de Disney y una ”curada” caracterización de la familia Simpson, con sofá incluido.
Momo dice adiós a la fiesta
Tras la fiesta, en torno a las 15.00 horas, todos los asistentes se han agrupado alrededor del dios Momo -este año caracterizado con mucho color y con una tarta que representa el 40 aniversario del Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas (COAC) de Córdoba- para decirle adiós entre llamas, como marca la tradición. Así, se han quemado los posibles pecados que se hayan podido cometer durante esta festividad y se ha abierto paso la Cuaresma, que se viene celebrando desde esta semana.
Comparsas, cuartetos, chirigotas y aficionados del carnaval se despiden y ponen el foco en la próxima edición, con nuevas ilusiones, ideas y letras con las que sorprender.
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