Disfrutar de la excelencia gastronómica de Brote no solo es posible gracias a su buen hacer en la cocina, sino que además viene acompañada por los mejores vinos de las diferentes denominaciones de origen, siempre con un toque genuino para cada plato y momento.  

Ánima Negra ÀN/2 2020

Mallorca, uno de los más conocidos en las islas, el cual se compone de las siguientes variedades: un 65% de callet, 20% mantonegre y fogoneu, 15% sirah. Con 13 meses de crianza en barricas. Este vino es ideal para acompañar quesos, setas, embutidos o carnes rojas, como el lomo alto de Angus de Nebraska, único en la provincia de Córdoba.

El Bosque de Matasnos 2019

Se cosecha en las tierras altas de la Ribera del Duero. Las variedades que lo componen son 95% Tempranillo, 4% Merlot y 2% Malbec. Maridaje: perfecto para el paté de perdiz, presa ibérica, solomillo de vaca gallega.

Hacienda Monasterio

Vino elegante en el cual predomina la uva de tempranillo cosechada en la Ribera del Duero. Tras la fermentación el vino pasa 20 meses de crianza en barricas de roble francés. Maridaje perfecto con el cochinillo.

Altos de Enebro, Finca La Herradura 2018

Variedad Tempranillo. Este vino equilibra potencia y frescura, un vino singular y muy especial.

Viña Tondonia reserva 2010

Variedades: 70% Tempranillo, 20% garnacha, 10% graciano y Macuelo. Este es un tinto clásico de Bodegas López de Heredia. Sus seis años de envejecimiento en barrico y otros seis de reposo en botella, hacen de él un vino atemporal, suave y redondo. Lo recomendamos tanto con un paté de pato, como carnes rojas o asados.

Para acompañar las ostras de Brote, tartar de gamba blanca, berberechos, almejas o vieiras gallegas, se puede degustar el albariño Pazo Cilleiro, el cual se puede pedir también por copas. O si se prefiere, también se puede degustar su Ponte da Boga, el único albariño que se cosecha en la Ribeira Sacra.