Gobierno y oposición negocian estos días en el Ayuntamiento de Córdoba para desbloquear la ordenanza de movilidad, que regulará la circulación de los nuevos vehículos de movilidad urbana (patinetes eléctricos) y adaptará la norma en vigor a la nueva realidad circulatoria de la ciudad. La intención del Partido Popular es lograr que la ordenanza salga adelante en el pleno del 13 de octubre, después de que se quedara en el tintero en la pasada sesión. De momento, la comisión de Movilidad celebrada ayer aprobó el dictamen de la nueva norma con los votos a favor de PP y Cs y la abstención del resto de grupos. Para que se apruebe de manera inicial la ordenanza en el pleno (la junta de gobierno local ya le dio luz verde en abril), necesitará más votos afirmativos que negativos, por lo que el equipo de gobierno, que quiere además que la norma reúna el máximo consenso, está dispuesto a aceptar algunas propuestas más de la oposición. Las que hacen Izquierda Unida y Podemos llegaron ayer (el PSOE ya las planteó en septiembre), por lo que hoy mismo está previsto que haya una nueva reunión para estudiarlas. El grupo municipal de Vox también baraja plantear algunas propuestas.
Una vez que la ordenanza se apruebe en el pleno --sea en este de octubre o sea en el próximo--, se abrirá el periodo de exposición pública de 30 días, para continuar con la tramitación de la norma hasta que se apruebe de manera definitiva y pueda entrar en vigor.
La intención del PP es llevar la moción al pleno de octubre después de quedarse en el tintero en la anterior sesión
El texto de la ordenanza en su redacción actual incluye ya algunas propuestas que el Consejo del Movimiento Ciudadano y el Consejo Social hicieron a petición propia y de colectivos como A Pata o la Plataforma Carril Bici (las de este colectivo basadas a su vez en las recomendaciones de la Red de Ciudades por la Bicicleta, a la que pertenece Córdoba).
Propuestas del PSOE
Las alegaciones del PSOE parten de varias premisas y de la plena prioridad de la defensa del recorrido peatonal. En este sentido, piden que «ni las bicicletas ni la nueva movilidad individual pueda ocupar los espacios peatonales, por pura seguridad» por lo que proponen determinar que las bicicletas y la nueva movilidad personal ocupen «los espacios previstos para ellos, o sancionar si así no sucede».
En contrapartida, los socialistas exigen mejorar y ampliar la red de carriles bici y los aparcamientos, así como el servicio de bicicletas públicas; incorporar plena prioridad a la movilidad de los sectores con necesidad de inclusión social, o unir la ordenanza a la de calidad del aire y la de ruido. En cuanto a los patinetes eléctricos, el PSOE propone que se exija taxativamente el cumplimiento de la catalogación del vehículo que emite el Ministerio de Industria, para que «de esta forma asignemos a cada vehículo su circulación en cada una de las vías que le corresponde circular en la ciudad», explica el concejal José Rojas.
Alegaciones de IU y Podemos
IU y Podemos presentan alegaciones conjuntas. La portavoz Cristina Pedrajas explica que entre sus propuestas está matizar que las bicicletas circulen por los carriles bici de manera «preferente», para que el artículo no se lea como una obligación. Asimismo, la concejala de Podemos informa de que no están de acuerdo con que «ni las bicicletas ni la nueva movilidad individual puedan ocupar los espacios peatonales, y sancionar si así se hace». «Estamos de acuerdo con que las bicicletas puedan circular por las calles peatonales de uso compartido, por los caminos de los parques y jardines y por los acerados que se permitan por su anchura y señalización, siempre y cuando la prioridad sea del peatón», matiza Pedrajas.
