El mes de mayo en Córdoba se está comportando, en el ámbito turístico de una manera bastante aceptable. Dicho en lenguaje de algunos de los responsables empresariales del sector, «está respondiendo a las expectativas», pues todavía falta la semana de la Feria que servirá para redondear los datos y ver si la actualidad tiene similitud o no con la época prepandémica. En el subsector de los restaurantes, el balance es muy positivo. En el de los hoteles, ha podido ser mejor, aunque se ha alcanzado el 85% de media de ocupación, mientras que para el turismo rural no han pasado de ser dos fines de semana normales.
Entrando en detalles, se ha podido ver que los restaurantes han estado completos los dos últimos fines de semana, durante la celebración de la Fiesta de lo Patios. Por eso dice el presidente de Hostecor, Fran de la Torre, que «se han cumplido todas la expectativas», en cuanto al lleno total, pero no en lo que se refiere a los resultados económicos, pues en ellos han influido, para mal, los problemas con los suministros, la subida del IPC o la inflación, entre otros asuntos, que han hecho, apunta de la Torre que «la cuenta de resultados no ha sido la que debiera ser».
Pese a esos buenos resultados, el presidente de los restauradores cordobeses hace una reflexión sobre el modelo de turismo que conviene a Córdoba. Fran de la Torre señala que «el turismo de masas puede echar para atrás al turismo de calidad, que es el que interesa». Añade que «todos esos autobuses que hacen que las calles se masifiquen desincentiva a otros clientes que vienen para más de un día y con un nivel de gastos más alto».
En lo que se refiere a los hoteles, según ha señalado el presidente de Aehcor, Félix Serrano, la ocupación media de los hoteles durante los fines de semana de los patios ha sido del 85%, lo que se puede valorar como bastante bueno, pero podría haber sido mejor, apunta «porque no ha funcionado, como en otras ocasiones, la reserva de última hora. Esta vez no ha tenido tanto tirón».
Explica Serrano que poco a poco se va recuperando la actividad , pero que todavía no se ha conseguido alcanzar los resultados de los años anteriores a la pandemia, pues, por un lado, el turismo internacional todavía es muy poco el que llega hasta Córdoba, porque todavía sigue pesando la pandemia, la crisis y últimamente la guerra de Ucrania. Por otro lado, este año estas semanas de mayo, fiestas grandes para el turismo cordobés, en las que habitualmente el visitante es español o andaluz, han coincidido con varios acontecimientos muy destacados en Andalucía, como son la Feria de Sevilla, la de Jerez, y una competición motociclista, que también cuentan con un gran seguimiento de visitantes.
Ante esta situación, Félix Serrano considera que es necesario aumentar la promoción de la ciudad y sus eventos, «porque mayo no se vende solo», apunta. A su juicio es necesario estar presentes en ferias tanto nacionales como extranjeras y promocionar y hace un llamamiento de cara al verano, que es temporada baja en Córdoba y es más que necesario insistir en la campañas y actividades que vendan Córdoba más allá de Andalucía.
En lo que se refiere al turismo rural, desde la asociación Emcotur, que agrupa a la mayor parte de negocios de alojamientos rurales de la provincia, su portavoz, Francisco Linares, señalaba que estas semanas donde ha habido más ocupación ha sido en la capital, pero en las provincia no se ha notado especialmente. Señala que el comportamiento de los negocios rurales ha sido como el de cualquier fin de semana normal. Explica esta situación señalando que las personas que tienen interés en ver los patios se desplazaron directamente a Córdoba y, a veces, suelen regresar en el mismo día, mientras que los alojamientos rurales se suelen reservar como mínimo para un fin de semana.
Explica que, como siempre, hay zonas donde las reservas son más abundantes, como es el caso de la Subbética, pero en las demás comarcas el nivel de reservas en estas fechas es bastante bajo.
Otro de los motivos que han hecho que el mes de mayo no sea especialmente para el turismo rural de la provincia, a juicio de Linares, radica, como han citado otros empresarios, en que hay varias fiestas de envergadura en Andalucía como es el caso de las ferias de Sevilla y Jerez, al tiempo que, recuerda, «venimos de la Semana Santa, que está muy reciente y los clientes están ya pensando en sus vacaciones de verano».
Al respecto, Francisco Linares señala que ese mercado sí está empezando a moverse ya. Es decir «ya se están empezando a recibir las primeras reservas para los meses de verano», pero reconoce que todavía es pronto para hacer una estimación.
