El Alcázar de los Reyes Cristianos lucía hoy una larga cola de turistas que aguardaban a entrar al monumento --el tercero de la ciudad más visitado-- al resguardo de la fresca sombra de su muro. La desconvocatoria parcial de la huelga anunciada por los trabajadores de los museos municipales --la plantilla, que aún tiene señalados paros para los próximos fines de semana, espera alcanzar un acuerdo esta semana-- permitió recobrar la clásica estampa de los guías pastoreando al rebaño hacia los lugares más emblemáticos de la ciudad, incluidos los museos de Julio Romero de Torres, Posada del Potro, Taurino y los Baños Árabes. 

La previsión hotelera de la Asociación de Empresarios de Hospedaje de Córdoba (Aehcor) para este fin de semana rondaba el 80% el martes pasado, pero las reservas de última hora --esas que ahora caracterizan los hábitos de consumo del viajante-- han incrementado el porcentaje con seguridad, alcanzando, a falta de cifras concretas, el lleno en muchos establecimientos hoteleros de la ciudad. 

Córdoba pisa el acelerador este fin de semana para coger la autopista de su mes por excelencia, después de dos años completos en los que la pandemia ha lastrado la economía local que vive de la hostelería y el turismo. Este puente está sirviendo de ensayo para los dos próximos, que coinciden con el Concurso de Patios, del 3 al 15 de mayo, y que suelen ser los de mayor afluencia turística en la capital cordobesa; y que rematarán los dos siguientes con la celebración de la Feria de Nuestra Señora de la Salud, del 21 al 28.  

Largas colas, el sábado por la mañana, para entrar al Alcázar de Córdoba. MANUEL MURILLO

A pesar de la oferta gastronómica de las cruces (menú clásico de feria y cerveza en vaso de plástico), los bares y restaurantes cordobeses también hacen caja con un día espléndido de temperaturas cálidas y primaverales y una oferta cada vez más competitiva y atractivas. Tuvieron problemas importantes todos aquellos que se lanzaron a comer a la calle sin reserva previa. 

Algunos como el propietario del bar La antigua, ubicado en el Paseo de la Ribera, A Antonio, esperaban que hoy domingo fuera incluso mejor. «Los días de puente vengo observando que los domingos son aún mejor día y que aumentan las reservas», comenta.