La Asociación de Empresarios de la Construcción e Infraestructuras de Córdoba (Construcor) ha afirmado este jueves, en referencia al impacto que la huelga en el transporte está teniendo en este sector, que ya «hay muchas obras paradas y otras que no se inician por las circunstancias». En este sentido, las fuentes consultadas han destacado que «la inquietud y el pesimismo son grandes» en estos momentos.

Por su parte, el alcalde de Córdoba, José María Bellido, ha advertido de que la huelga del transporte está empezando a afectar a algunas obras públicas de la ciudad, aunque ninguna ha tenido que parar de momento su actividad. Bellido ha reconocido que quizá una de las más afectadas es la del Centro de Ferias y Convenciones, «que no está funcionando al ritmo que debería funcionar», por lo que de extenderse la huelga en el tiempo podría verse obligada a ampliar de nuevo los plazos de finalización de la obra.

La madera acusa el paro y la guerra

El presidente de la Asociación de Empresarios de la Madera y Mueble de Córdoba (Uniema), Enrique Fernández, ha indicado que «la falta de suministros esta provocando la paralización de procesos productivos y si no se arregla esta semana, la semana que viene se podrían paralizar fábricas y plantear regulaciones de empleo». Además, ha detallado que a la escasez de materias primas se suma el problema de distribución. 

Enrique Fernández ha destacado que algunas maderas han subido hasta un 60% y ha apuntado que España compra en torno a un 15% de la madera a Rusia y Ucrania, por lo que la guerra entre estos países también perjudica al sector, que, asimismo, sufre el encarecimiento de otros productos como el hierro, el cartonaje, el plástico y las energías.

Unas 700 empresas y autónomos se dedican a la madera y el mueble en Córdoba y generan alrededor de 3.800 empleos directos. La huelga en el transporte «ha sido un parón importante» cuando estaban en vía de regresar a los niveles de actividad previos a la pandemia y el presidente de Uniema señala que la guerra también ha provocado que el cliente final sea más conservador en la decisión de compra.