La Gerencia Municipal de Urbanismo tiene previsto poner en marcha un equipo estable municipal para velar por el patrimonio histórico, y que incorpore las nuevas tendencias y últimas metodologías de trabajo. La obra de la Puerta del Puente, que este jueves luce ya sin vallas después de la intervención a la que ha sido sometido, ha sido para los técnicos de Urbanismo "un laboratorio" de pruebas que les ha permitido experimentar con esas nuevas tecnologías aplicadas a la arquitectura y en especial a la conservación del patrimonio arquitectónico.

El jefe de la Oficina de Arqueología de la GMUJuan F. Murillo, ha explicado que "el mundo de la intervención sobre el patrimonio está cambiando todos los días" y que lo que pretenden generar es "un equipo municipal estable de intervención sobre los elementos patrimoniales de nuestra titularidad que incorpore dentro de lo posible las últimas tendencias, materiales y metodologías de trabajo".

Este grupo de trabajo funcionaría en conexión permanente con la Consejería de Cultura y Patrimonio y con el Instituto Andaluz de Patrimonio, como se ha hecho en la intervención de la Puerta del Puente. Con esta idea, Urbanismo quiere abrir una vía de intervención sobre el patrimonio de la ciudad gracias a las dotaciones que el Ayuntamiento de Córdoba y con el objetivo, por un lado, de intervenir progresivamente sobre esa amplísima nómina de elementos patrimoniales que hay en Córdoba, y por otro lado, introducir un nuevo concepto: el de conservación preventiva. "Lo mismo que vamos al hospital cuando estamos en una situación grave, la Puerta del Puente ha necesitado pasar por quirófano y otros elementos patrimoniales necesitan medicina preventiva", ha resumido.

Esa conservación preventiva, se haría a priori y a través de diagnosis de cada uno de los elementos. A partir de ahí se confeccionará un plan de actuación y se harán seguimientos --articulado en un protocolo-- para ver la evolución de los monumentos. "La piedra necesita día a día una serie de cuidados y una serie de diagnosis eso es lo que pretendemos cubrir con ese plan de mantenimiento y conservación preventiva", ha añadido.

En qué consistirá el plan de conservación preventiva

Por su parte, la arquitecta del Servicio de Proyectos de la GMU, Rosa Lara, ha informado sobre la finalidad de ese plan de conservación preventiva, que servirá para ir viendo si los tratamientos funcionan correctamente y en el caso de que no fuera así si tomar las medidas oportunas. En este plan de mantenimiento se incluirá, por ejemplo, la limpieza al menos cada dos años de los elementos patrimoniales para evitar que la suciedad orgánica termine formando costra y su eliminación requiera incluso productos químicos. Además se vigilará la evolución de los morteros que forman parte de esos edificios o elementos arquitectónicos para ir reparando las pequeñas fisuras que tengan.