El Partido Popular en Córdoba se abona a la vía Feijóo y reclama la convocatoria urgente de un congreso para cerrar la crisis abierta por el enfrentamiento entre el líder nacional, Pablo Casado, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. «Es urgente convocar un congreso extraordinario para tener un partido fuerte al servicio de los españoles», declaró Adolfo Molina, presidente del PP en Córdoba, por la mañana, unas horas antes de que Casado cediese a la presión y anunciase que habrá cónclave y de que el secretario general, Teodoro García Egea, dimitiese.

Los populares cordobeses han podido presumir de unidad interna en los últimos años y de estar en total sintonía con el PP andaluz y esta ocasión tampoco ha sido distinta. Las redes sociales exhibieron mensajes muy similares en Córdoba al expresado por el presidente andaluz, Juanma Moreno: la solución pasa por Alberto Núñez Feijóo, por un congreso extraordinario a convocar en el plazo de un mes, y por un proyecto a largo plazo que destierre soluciones de paso. 

En las primarias, con Cospedal

En las primarias que auparon a Pablo Casado al frente del PP en España, celebradas en 2018, la provincia de Córdoba eligió ganadora a María Dolores de Cospedal, que recibió 324 sufragios, mientras que Soraya Sáenz de Santamaría logró 254 y Pablo Casado, con 236, fue el que menos apoyó consiguió.

Visita de Pablo Casado a Córdoba el 28 de julio del 2018. A.J. GONZÁLEZ

La consigna de la dirección provincial en aquel momento clave para la sucesión de Mariano Rajoy fue dar libertad a sus militantes, aunque algunos dirigentes expresaran su predilección por la ganadora. Hoy ni siquiera el casadista más destacado del PP en Córdoba, el diputado nacional Andrés Lorite, ha querido hacer declaraciones públicas. La semana pasada sí expresó su apoyo expreso al líder nacional, al igual que hizo el portavoz de los populares en el Parlamento andaluz y exalcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, que pidió defender las siglas y el proyecto con lealtad frente al "interés particular".

El resto de dirigentes populares de la provincia se han mantenido de perfil estos días, quizá para no contribuir al ruido mediático, que en lo orgánico ha debido ser ensordecesor. Prácticamente no ha sido hasta hoy cuando algunos han roto ese silencio y en parte esa neutralidad abogando por la celebración de un congreso nacional urgente. Desde su confinamiento por covid, el alcalde de Córdoba, José María Bellido, pidió convocar «lo antes posible» el cónclave. En un tuit, el regidor afirmó: «Nuestro país y los millones de votantes y afilados populares deben contar con un partido fuerte y cohesionado para liderar el cambio que España necesita cuanto antes». 

Por su parte, el delegado del Gobierno andaluz y número 3 de los populares en Andalucía, Antonio Repullo, se alineó también con las tesis del presidente y del PP andaluz para reclamar la convocatoria de un congreso extraordinario dentro de constantes apelaciones al «diálogo» entre las partes. También lo ha hecho la parlamentaria andaluza Beatriz Jurado al pedir que "en estos difíciles momentos que vivimos en el Partido Popular es necesario lo antes posible contar con la participación de todos los afiliados. Esa militancia representa al partido fuerte y unido que ha servido con garantías a ese proyecto de todos que es España".

En la misma sintonía se han expresado alcaldes del PP como Jorge Jiménez, primer edil de La Rambla, o el de Añora, Bartolomé Madrid. El primero ha asegurado que "la situación creada en los últimos días en los órganos de dirección nos obligan a tomar soluciones sensatas en el tiempo más breve posible". 

También se ha pronunciado hoy el teniente de alcalde de Hacienda, Salvador Fuentes, sobre esta crisis. “Si ahora podemos decir que España no tiene por qué estar mal gobernada es porque el PP demostró altura de miras y buen gobierno. Una obra que nos obliga a todos adoptar soluciones urgentes para ofrecer esa alternativa que España tanto necesita para recuperar la senda del progreso”.